La Reina llegó a Salamanca de forma discreta a eso de las 21.00 horas del lunes y pudo ver al padre de su madre aún con vida. La familia Rocasolano despidió ayer a su miembro más entrañable, Francisco, que falleció el lunes en un hospital de Salamanca a los 98 años de edad, en la más estricta intimidad, en el tanatorio municipal salmantino Virgen de la Salud.
La Reina visitó a su abuelo antes de que éste falleciera en el Complejo Asistencial de Salamanca. Llegó el lunes a las 21.00 horas y pudo despedirse de él minutos antes de que falleciera, a los 98 años, tras sufrir un problema cardiológico que no pudo superar. La Reina abandonó el complejo asistencial la noche del lunes alrededor de las 22.00 horas.
Tras el fallecimiento se llevaron a cabo los trámites burocráticos, como el parte de defunción. Los Reyes llegaron al Tanatorio Municipal Virgen de la Salud a mediodía para asistir a la incineración del difunto, que se produjo a las 13.00 horas del martes. Tras recoger las cenizas, Letizia, Felipe y el resto de la familia regresaron a Madrid.
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