"Fueron solo 5 minutos, le di una palmada en el trasero y recuerdo su ropa interior", dice la "señora mayor" que le quitó la virginidad al Príncipe Harry. Ella ahora tiene 40 años, uno menos que Meghan Markle y solo dos más que el hijo pequeño de Diana de Gales. Admite que estaban muy borrachos; iban como Las Grecas: diez tequilas en el cuerpo, y otras sustancias. La mujer a la que se refiere el duque de Sussex en sus memorias era una amiga de cerca de Highgrove, residencia familiar de Carlos y Camilla, en Gloucestershire, a dos horas de Londres. El benjamín del hoy rey perdió la virginidad en la calle, detrás de un pub repleto de gente.