Cada año que pasa, se hace más patente el problema que supone la emergencia climática para el planeta y para la vida humana. Se trata de un fenómeno que afecta de forma directa a un recurso esencial: el agua, imprescindible para la supervivencia de cualquier ser vivo, cuya disponibilidad y calidad se ven directamente perjudicadas a causa del calentamiento global. Se trata de un reto que afecta especialmente a nuestro país, ya que España sufre de sequías e inundaciones de forma cada vez más frecuente y muchos de sus territorios se enfrentan año tras año a la escasez de recursos hídricos. En el futuro, esta circunstancia se agravará, debido al aumento de la población mundial y su consecuente necesidad de más recursos y alimentos. Además, de acuerdo con las estimaciones científicas, dentro de solo siete años, el 47% de la población vivirá en áreas con estrés hídrico.