
La empresa ha inaugurado la nueva planta en Zaragoza en la que ha invertido un total de 27 millones de euros. Estas instalaciones estarán destinadas a la sílice precipitada, que se emplea en el sector neumático. Una actividad que ha supuesto la generación de 30 puestos de trabajo.
Industrias Químicas del Ebro (IQE) amplía y diversifica su actividad con una nueva planta de sílice precipitada en el polígono Malpica de Zaragoza con la que entra en el sector neumático dentro del que trabajará con grandes compañías del sector.
Estas instalaciones, cuya inauguración coincide con la celebración del 60 aniversario de la empresa, tienen una superficie de producción de unos 8.000 metros cuadrados, estando situada la nueva planta sobre una parcela de 130.000 metros cuadrados. Unas instalaciones en las que la actividad se desarrolla durante las 24 horas al día para lo que se han generado 30 puestos de trabajo.
La nueva planta produce en la actualidad 10.000 toneladas, aunque tiene capacidad para llegar a las 20.000 toneladas anuales. De momento, está trabajando al 50%, estando previsto que a finales del año 2019 se llegue al 90% de la capacidad productiva.
Esta sílice -aunque en el futuro no se descarta poder ampliar la producción a otras más especiales-, se empleará para fabricar neumáticos ecológicos. La previsión es que posteriormente, esta producción se destine a la fabricación de neumáticos industriales y para camiones. Además, este producto se puede emplear como soporte de complejos vitamínicos en el sector de la alimentación animal.
Con la puesta en marcha de esta actividad, IQE amplía su cartera de productos entre los que ya figuraban el silicato sódico, metasilicato, sílices y silicato de aluminio, además de otros productos a la carta.
Son productos que se destinan a diferentes mercados como la cerámica, pintura, construcción y detergentes -sumándose ahora con esta nueva planta el sector neumático-, que se destinan tanto al mercado nacional como internacional, ya que IQE tiene presencia en más de 50 países. Precisamente, los mercados exteriores son el destino del 50% de su producción, aunque el objetivo es llegar al 90%.
La empresa aragonesa, que tiene una plantilla de 180 empleados, tiene tres centros de producción, que suman 165.000 metros cuadrados y comercializa alrededor de 250.000 toneladas al año de cerca de 30 productos.
Las nuevas instalaciones han sido visitadas por el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, y por la consejera de Economía del Gobierno de Aragón, Marta Gastón, entre otras autoridades y representantes del tejido empresarial aragonés.