La organización empresarial considera que la tarifa plana provoca competencia desleal con los autónomos que llevan años trabajando. Además, aboga por un sistema igualitario con la asimilación gradual del RETA al Régimen General de la Seguridad Social.
Los datos son claros. En 2015, se produjeron en España un total de 665.000 altas de autónomos por 625.000 bajas y la situación no ha sido mejor en 2016, año en el que se han registrado un total de 661.000 altas y 640.000 altas. Además, a finales del año 2016, hubo 500.000 autónomos menos que en 2007.
Y la situación no ha sido muy diferente en Aragón. En 2016, se contabilizaron un total de 105.663 -lo que representa el 19,9%-, produciéndose un descenso del 0,1% en comparación con el ejercicio anterior.
A esta situación se suma que, en España, con más de tres millones, los autónomos suponen el 18,3% del total de afiliados a la Seguridad Social, de los que el 85% cotizan por la base mínima. Además, e RETA es un régimen deficitario en cerca de 7.000 millones de euros, lo que puede conllevar una clara discriminación para la pensión de jubilación de los autónomos en relación a los del régimen general de la Seguridad Social.
Ante estos datos, desde Cepyme Aragón se aboga por impulsar reformas estructurales en el trabajo autónomo, puesto que "la tarifa plana es una medida más efectista que eficaz que provoca una clara discriminación entre los nuevos autónomos y los que han sido capaces de superar la crisis, entre los que, además, se puede producir una competencia desleal".
La organización empresarial considera conveniente que se pongan en marcha medidas urgentes legislativas para los autónomos en su conjunto, que sean consensudas.
Entre las medidas que se proponen destaca la flexibilización de las condiciones de los autónomos y las cotizaciones en función de los días trabajados y, proporcional y progresivamente, según los rendimientos netos mensuales, contemplando una base mínima por debajo de que se pudiera estar exento de cotizar.
Otras propuestas se centran en que se acometa una asimilación gradual del RETA al Régimen General de la Seguridad Social con el fin de que se vayan homologando derechos y prestaciones y se delimite la responsabilidad del autónomo con su patrimonio.
Desde Cepyme Aragón también se demanda una ley de segunda oportunidad y que se pueda compatibilizar el cobro de una parte de la pensión con el trabajo autónomo.
Un paquete de medidas al que se añaden las reivindicaciones que viene realizando Cepyme de Aragón para evitar la morosidad y facilitar la financiación y liquidez, aplicar la división en lotes en las licitaciones públicas para que las pymes y autónomos puedan acceder más fácilmente y certificar el cobro de los subcontratistas para tramitación del pago de las certificaciones correspondientes.
Igualmente, se demanda modificar la fiscalidad con el objetivo de acercar a la realidad las deducciones y que se aplique un criterio serio y diferente de caja en la liquidación de impuestos como el IVA a la que se acoge un bajísimo porcentaje, y acceder a la tecnología y a la formación.
Un conjunto de medidas que para el presidente de Cepyme Aragón, Aurelio López de Hita, es necesario que se acometan para "reducir las cargas administrativas y fiscales de los autónomos y mejorar su protección social porque la consecuencia de la falta de una regulación completa en todas estas materias es que la mayor parte de los proyectos que se inician en el colectivo de autónomos, no se consolidan".