
El Ayuntamiento de Zaragoza ha sacado a licitación las obras para reformar la calle Sixto Celorrio --ubicada entre el Paseo de la Ribera y la Plaza San Gregorio-- y la calle Ricla, dos actuaciones que supondrán una inversión municipal total de 1,4 millones de euros. Las empresas interesadas tienen hasta el 4 de febrero para presentar sus ofertas.
Una vez completado el proceso de adjudicación, la previsión es que las obras puedan comenzar a mediados 2022. Estas dos renovaciones integrales forman parte de la 'Operación Calles', impulsada a través de la sociedad municipal Ecociudad Zaragoza, que contempla la reforma de siete vías de la capital aragonesa durante este 2022.
Las calles Sixto Celorrio y Ricla son las únicas que faltaban por salir a licitación y se unen a las de la primera fase de la Avenida Navarra y las calles Reina Fabiola, Félix Latassa, Cuarte y San Miguel, que ya han completado o están a punto de completar su proceso de adjudicación, ha indicado el Consistorio zaragozano en nota de prensa.
La consejera de Infraestructuras del Ayuntamiento de Zaragoza, Patricia Cavero, ha destacado que Sixto Celorrio y Ricla se transformarán en solo unos meses en vías "totalmente accesibles y con tráfico más calmado".
"Los dos diseños tienen en común que dan más protagonismo al peatón y favorecerán que sean calles más amables para sus vecinos y comerciantes", ha añadido.
Supresión de barreras arquitectónicas
En el caso de Sixto Celorrio, en el tramo entre el Paseo de la Ribera y la Plaza de San Gregorio, se ampliarán las aceras, se eliminarán las barreras arquitectónicas y se crearán nuevos espacios de encuentro vecinal con arbolado y bancos. Esos espacios de descanso estarán ubicados en la confluencia de las calles García Arista y Ricardo del Arco.
También se mantendrá la calzada segregada --debido a que es una vía con tráfico intenso--, una banda de aparcamiento y se implantarán medidas que ayuden a reducir la velocidad de paso de los vehículos y mejorar la seguridad de los peatones. El presupuesto base de licitación es de 975.700 euros y tendrá un plazo de ejecución de seis meses.
Por otro lado, la calle Ricla pasará a ser de plataforma única y prioridad peatonal sin barreras arquitectónicas, lo que permitirá solucionar los problemas de accesibilidad que presenta actualmente el pavimento.
Igual que en la otra vía, se conservará una banda de aparcamiento y se ensancharán las aceras, sobre las que se distribuirá el arbolado y parterres con arbustos. En este caso también se ha planteado un plazo de ejecución de seis meses y un presupuesto de licitación menor, de 458.700 euros.
Relacionados
- COPHA se adjudica las obras de reforma en Zaragoza por 3,9 millones
- El Ayuntamiento de Zaragoza da luz verde al parking subterráneo del parque Bruil
- El Gobierno de Zaragoza aprueba el proyecto de la futura plaza de Salamero
- El Ayuntamiento de Zaragoza impulsa el expediente para adjudicar la construcción y explotación del Centro Deportivo La Almozara