
Si estás metido de lleno en el mundo de la decoración y las reformas, estarás de acuerdo que es tan extenso como abrumador. Y es que, aunque al decidir cada detalle es una gran opción porque así te aseguras de que todo esté a tu gusto, hay ocasiones en las que las tendencias y los miles de elementos que hay que tener en cuenta complican la tarea.
Cuando la imaginación y la inspiración parecen haberse esfumado, observar revistas de decoración puede ser una gran idea, ya que ahí únicamente hay que poner el piloto y decidir si algo nos gusta o no. En el baño, además de escoger el color acento de la estancia o los elementos principales como el lavabo o el inodoro, también podemos decantarnos entre una ducha cómoda y rápida o una relajante bañera.
Si eres de los que prefieren el primer grupo, te interesa saber cuál es la última tendencia en Italia, que promete arrasar de cara al próximo año, y que es una solución elegante, moderna y económica.
Un espacio abierto y más elegante
A diferencia de las duchas convencionales, la tendencia italiana se caracteriza por ofrecer un espacio mucho más abierto. Esto se consigue con un plato de ducha a ras de suelo, sin escalones ni barreras, y una mampara que solo cubre un lateral. Las ventajas son más que evidentes, pues además de limpiarse fácilmente, proporciona una sensación de amplitud ideal para las estancias más pequeñas. Es más, este tipo de diseño es ideal para aquellas casas con niños pequeños o con personas con movilidad reducida, pues su acceso sin obstáculos facilita la entrada.
Como se acaba de comentar, este tipo de ducha italiana destaca por su fácil limpieza. Esto se entiende mucho mejor si tenemos en cuenta que, en vez que contar con tres mamparas de cristal, esta solución se reduce a una, y en muchos casos ni siquiera es de ese material. Eliminar la cal suele ser uno de los mayores retos de baño, de forma que con esta alternativa el proceso se simplifica.

Además, otro de los puntos fuertes de esta ducha italiana es su gran capacidad para adaptarse a los diferentes estilos y materiales. Con esto se quiere decir que es posible construir una ducha en azulejo o con un revestimiento más moderno, como podría ser el microcemento o la piedra.
En definitiva, este tipo de ducha se consolida como una de las tendencias más fuertes en baños de cara al año que viene.