
Es muy sabido que el bicarbonato es uno de los ingredientes con múltiples aplicaciones en el hogar, tanto para la limpieza como para el cuidado personal, gracias a sus propiedades, que convierten este producto natural en un gran aliado, sobre todo, si se mezcla con otros ingredientes naturales de gran valor, como es el caso del aceite de oliva.
De hecho, a la hora de limpiar el hogar, es muy popular la mezcla de bicarbonato con vinagre o con limón, entre otras combinaciones. Sin embargo, es poco conocido el uso del bicarbonato con el aceite de oliva. ¿Para qué sirve exactamente? Ambos poseen numerosas propiedades beneficiosas, también en la belleza y el cuidado de la piel.
Combina aceite de oliva y bicarbonato
En primer lugar, el aceite de oliva y el bicarbonato de sodio se pueden mezclar para conseguir un exfoliante casero y natural para la piel de la cara o del resto del cuerpo, ya que ayuda a hidratar y nutrir la piel, al mismo tiempo que elimina la piel muerta, devolviendo el brillo y diciendo adiós a las imperfecciones, tal y como se recoge desde el portal italiano DH.
Concretamente, es el bicarbonato de sodio el ingrediente que tiene las propiedades exfoliantes y purificantes, lo que ayuda a eliminar impurezas, células muertas y suciedad, mientras que el aceite de oliva se encarga de la hidratación y la nutrición de la piel de la cara.
Así, la mezcla se puede combinar para conseguir todos estos beneficios, aunque se recomienda no abusar de este preparado natural, ya que todo en exceso es malo. La exfoliación física no se debe hacer con frecuencia, ya que se puede irritar la piel, sobre todo si hablamos de pieles sensibles. Al mismo tiempo, hay que saber que no es recomendable usar mucho aceite de oliva u otros aceites grasos en pieles con tendencia grasa.
Otros usos de la mezcla
Además de este uso de belleza para la piel, la mezcla de bicarbonato de sodio y aceite de oliva sirve para la limpieza de objetos metálicos. Solo es necesario mezclar los dos ingredientes y frotar con ello la superficie de los objetos, esperando unos 10 minutos hasta que haga efecto, para después retirar los restos de producto con una bayeta o paño húmedo.