
Los animales intervenidos en un zoo clandestino de la localidad de Nules (Castellón) por la Guardia Civil fueron encontrados en buen estado y "bien cuidados". Asimismo, los investigadores han apuntado que los detenidos tenían a los animales como "hobby" además de para su venta.
En profundidad
El subdelegado del Gobierno en Valencia y delegado del Gobierno en funciones, José Rodríguez Jurado, el coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Valencia, Juan Martínez Ros, y un sargento del Seprona han facilitado este martes en atención a los medios datos de la Operación 'Aonix', que ha permitido desmantelar un zoo clandestino privado con más de 150 animales exóticos de 56 especies, algunas de ellas en peligro de extinción, e investigar a dos hombres de 30 y 35 años por delitos contra la fauna por el tráfico de especies protegidas y contrabando y receptación.
El sargento del Seprona ha detallado que los animales, que estaban en una parcela del término municipal, han sido intervenidos pero, de momento, siguen bajo custodia del dueño, mientras se llevan a cabo gestiones con el Ministerio correspondiente para trasladarlos a diversos zoológicos y centros de protección animal. "Puede haber convenios con Europa por si no hay espacio para que los animales estén aquí", ha precisado.
En los registros ha participado personal del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Democrático, encargado de la identificación y catalogación de las especies que han sido encontradas en este registro.
En el marco de esta operación, han sido investigados dos hombres de 30 y 35 años --uno de ellos vecino de Nules y el otro de una localidad de la provincia de Valencia-- por delitos contra la fauna, por el tráfico de especies protegidas, por contrabando y por receptación, ya que dos guacamayos intervenidos habían sido robados de un zoológico de Almería --al que serán devueltos-- y un tercero a una mujer que no había presentado denuncia al pensar que el animal se había escapado. Las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de la localidad de Nules.
Más detalles
Martínez Ros ha detallado que este núcleo zoológico ilegal contenía no solo especies protegidas sino también otras con diferentes grados de protección. Entre ellos, ha citado dos servales, una cebra, dos tucanes, dos grullas coronaldas, seis turacos, cuatro ibis, dos suricatos, tres mangostas, una zarigüeya, dos muflones americanos, cinco búhos, un dromedario, los tres guacamayos, cinco kinkajúes, y dos puercos espines, entre otros.
Los agentes del instituto armado dieron con este zoo clandestino después de ver hace unos meses, y dentro de la vigilancia que se realiza para detectar y evitar posibles ventas de especies protegidas por la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), un anuncio en una página web que ofrecía la venta de animales protegidos.
La Guardia Civil comprobó a través de ese anuncio que se ofertaban para su venta varias especies protegidas, entre las que destacaba la nutria asiática, además de los agoutis y kinkajou. Asimismo, también se ofrecían crías de varias especies protegidas como suricatos, canguros y caracales.
Tras consultar la vida laboral de la persona que publicó los anuncios y hacer un operativo y seguimientos, localizaron a otro hombre para el que trabajaba y que era el propietario del zoo clandestino.
"Lo que nos llevó a la operación fue que se estaba anunciando por medio de redes sociales la venta de la nutria asiática, que está protegida por el apéndice 1 del CITES. Una de las causas de la disminución de esta especie es que se está utilizando como mascota", ha apuntado el sargento a cargo de la operación.
A tener en cuenta
El propietario de los animales no solo tenía a estos ejemplares para su venta, sino que, de acuerdo a los investigadores, este zoo clandestino era "probablemente, un hobby", debido al minucioso cuidado en el que se han encontrado los animales.
La Guardia Civil ha destacado también que los animales no figuraban en ningún registro y ninguno de los dos identificados tenía permiso de criador o autorización de núcleo zoológico. "Cuando los animales son de CITE hay que avisar al Ministerio de Medio Ambiente para dar un certificado de los que nacen, deben estar registrados, pero por lo que vemos, esto no se ha hecho aquí", ha destacado el sargento.
Asimismo, ha apuntado que la Ley de Protección Animal, tanto la nacional como la valenciana, prohíbe la tenencia de primates y la de carnívoros terrestres de más de cinco kilos, normativa que ha sido incumplida por los investigados debido a la tenencia de lémures --primates-- y servales --carnívoros--.
Los funcionarios del Ministerio de Medio Ambiente han identificado, entre las especies encontradas en las jaulas del zoo clandestino, al estornino de Bali, un ave con solo 50 ejemplares en libertad, y otras especies catalogadas con la máxima protección internacional al tratarse en especies en peligro de extinción, como dos lémures cata y las dos nutrias asiáticas.
La Benemérita desconoce por el momento cómo han llegado estos animales a Nules, pero se sospecha que "por el ámbito, son vendedores de países del centro y el este de Europa".
Según informes provisionales, la valoración económica de los daños causados a la fauna silvestre en este zoo clandestino en el ámbito internacional supera los dos millones de euros.
Rodríguez Jurado ha agradecido a la Guardia Civil "el excelente trabajo que realiza cada día sobre la ciudadanía" y ha apuntado que esta operación es "una muestra más de su eficacia y compromiso en la defensa de la seguridad, la legalidad y la protección del bienestar común".
"El desmantelamiento de este zoológico clandestino es fruto de un trabajo minucioso de investigación y seguimiento que evidencia el compromiso de las fuerzas de seguridad en la detección de actividades ilícitas que ponen en riesgo tanto el bienestar animal como la seguridad pública de todos", ha finalizado.