
Un hombre de 45 años que ha dedicado más de dos décadas a ahorrar limitando sus gastos de forma draconiana hasta pagar lo mínimo posible para su subsistencia y con el objetivo de adelantar su jubilación ha llegado a su objetivo, pero al amasar el dinero que creía necesario se ha dado cuenta que que probablemente no le baste.
Lo relata el South China Morning Post: una persona cuyo nombre no ha trascendido originaria de Japón contó su odisea en redes sociales: ha estado cerca de 21 años privándose de cualquier gasto y basándose en la filosofía del movimiento FIRE (independencia financiera, jubilación temprana), pero la realidad ha roto todos sus esquemas y, con su dinero ahorrado, asegura que todo ha sido "inútil".
El hombre, que se hacía llamar en redes sociales 'El hombre que definitivamente renunciará', se ha visto afectado negativamente por la depreciación del yen, moneda japonesa: "Si el yen sigue depreciándose, nunca alcanzaré la libertad financiera. ¿Para qué he trabajado estos 21 años? Todo es inútil, qué trágico".
Todo comenzó a principios de siglo, cuando este hombre se propuso alcanzar un objetivo de ahorro de 100 millones de yenes, unos 580.000 euros. Para ello, se propuso limitar al máximo todos sus gastos: alquiló una habitación de la empresa en la que trabaja para evitar pagar una casa, se alimentó a base de arroz y verduras durante años, evitó el uso de electrodomésticos para ahorrar en energía...
Su régimen de ahorro fue tan estricto que llegó en ocasiones al surrealismo: en invierno entraba en calor haciendo ejercicio, se aplicaba camisetas mojadas para paliar el calor del verano y llegó a cocinar con el calor propio de la época estival en el limpiaparabrisas del coche de un amigo.
Fueron 20 años y 10 meses de sacrificio que le depararon finalmente 135 millones de yenes, unos 780.000 euros. A partir de ese momento, se permitió licencias como comidas de mayor calidad, la compra de electrodomésticos...y, con el paso del tiempo, empezó a percibir señales negativas: el dinero ahorrado no le iba a llegar para aguantar toda la vida.
La situación empeoró a partir de este año, cuando se agudizó la depreciación del yen que ya asomaba a finales de 2024 y, en paralelo, de sus ahorros. Su testimonio, expuesto a través de las redes sociales, le ha hecho merecedor de buena parte de los usuarios, que han expresado su simpatía con el ciudadano.
Queda por saber si este aventurero financiero dará marcha atrás en su misión y regresará a trabajar o aguantará con sus ahorros...a pesar de que cada vez son menores.