Cómo cuidar las plantas de interior: si las puntas de las hojas están marrones, es por este problema concreto

Cuidar las plantas de interior es todo un mundo. Cada especie tiene unas necesidades y requiere unos cuidados diferentes, aunque, algunas de las más comunes, como el Pothos o la Sansevieria, son muy sencillas de cuidar, ya que no requieren apenas atención ni tienen necesidades concretas.

Sin embargo, hay un problema muy común en las plantas de interior, que suele darse de forma frecuente y que tiene una sencilla solución. Se trata de las hojas marrones, que aparecen rápidamente y que dan una sensación de planta descuidada y poco sana.

¿Por qué las hojas de la planta se ponen marrones?

En primer lugar, hay que comprender el motivo general y más habitual por el que una planta de interior tiene, de repente, las hojas marrones. La principal razón, sobre todo en los meses de invierno, es que la planta está indicando que el aire está demasiado seco.

El ambiente seco y las plantas de interior no suele ser una buena combinación. De hecho, paradójicamente, el aire se vuelve mucho más seco durante los meses de invierno, ya que la casa permanece completamente cerrada y con la calefacción encendida, disminuyendo al completo la humedad ambiental.

Este problema afecta especialmente a las plantas de interior tropicales, aunque todas ellas pueden empezar a volver la punta de sus hojas marrones, por lo que habrá que estar atento a este factor, que hace que las hojas se sequen y, por tanto, se pongan de ese color marrón.

¿Cómo evitar las hojas marrones?

De este modo, la solución a este problema tan frecuente es aumentar la humedad ambiental, por lo menos, en la zona en la que se encuentre la planta. Para ello, se puede usar un humificador, que hay que colocar al lado de las plantas. También se puede usar un bote con difusor para echar agua alrededor de la planta, algo más simple aunque menos efectivo, ya que habrá que ser constante con este método.

También es muy buena recomendación poner un pequeño plato con agua justo debajo de las macetas, de tal modo que las plantas puedan absorber agua de forma natural y dosificada cuando lo necesiten. Al mismo tiempo, agrupar las plantas que tengamos en una misma estancia hará que aumente la humedad ambiental.

Otros factores que influye en las hojas marrones

Además de ese motivo principal por el que las hojas de las plantas se ponen marrones, hay otro factor clave que influye del mismo modo: el riego inadecuado. Es decir, tanto un exceso de agua como la falta de riego pueden hacer que las hojas se pongan marrones.

De este modo, habrá que consultar las necesidades de agua específicas en cada estación (verano e invierno, fundamentalmente) para saber cuánta cantidad de agua necesita cada especie de planta de interior que tengas en tu hogar.

Sea cual sea la dosis recomendada, nunca encharques la planta, ya que las raíces se pueden podrir rápidamente con este exceso de agua. De hecho, en muchos casos, no hay que regar si la tierra está un poco húmeda o no se recomienda echar el agua directamente en la tierra, sino que es mejor usar un plato con agua y colocarlo debajo de la maceta para que la planta lo absorba poco a poco.

También hay que controlar la ubicación de la planta, no solo por la humedad ambiental ya comentada, sino también por la luz. La iluminación es clave en una planta de interior y, cuando esta recibe luz directa del sol, puede volver sus hojas marrones, ya que estas se secan y se queman. Sin embargo, también la oscuridad constante o la falta de luz suficiente también influye en su aspecto, por lo que lo mejor es colocarla en una habitación luminosa, pero sin que los rayos de sol le den directamente.

Respecto a esto, también se debe tener en cuenta la corriente de aire frío. Por lo general, las plantas de interior son muy sensibles a los cambios bruscos de temperatura, sobre todo en invierno. Si está en una habitación donde soporta corrientes de aire frío, es muy común que las hojas se vean afectadas y se pongan marrones.

Cómo eliminar las hojas marrones

Si tu planta ya tiene las hojas marrones por alguno de estos motivos, lo primero que tienes que hacer es podar la planta. Solamente hay que quitar aquellas hojas afectadas. Pero, cuidado, no hay que cortar toda la hoja, sino solo las puntas y zonas que se hayan puesto marrones.

Tras este cuidado específico, se deben seguir las recomendaciones anteriormente mencionadas, centrándose sobre todo en aquellas que afecten más a la planta en concreto que tenga ya las hojas de color marrón. Solo hay que fijarse bien para saber cuál de los factores está fallando a la hora de cuidar el vegetal.