
Entre las diferentes tareas de limpieza del hogar, las que conciernen al baño y a la cocina son de las más complicadas, al mismo tiempo que tienen que ser las más efectivas, ya que son las dos estancias donde se requiere más higiene. Sin embargo, se pueden encontrar numerosos trucos para conseguir una limpieza rápida, sencilla y que no cueste mucho dinero, por ejemplo, a la hora de limpiar los desagües del fregadero y el lavabo.
De hecho, los desagües de ambas estancias son dos de los lugares donde más suciedad puede acumularse, mezclada con restos de jabón, de pasta de dientes, de alimentos, de pelos... Si no se limpia adecuadamente, es muy frecuente que el lavabo y el fregadero acaben por atascarse y, por tanto, el sumidero no tragará bien el agua. Al mismo tiempo, esta situación puede generar problemas de malos olores.
El truco para limpiar el desagüe, paso a paso
Así, para evitar todos estos problemas de higiene, basta con seguir un sencillo truco casero, para el que solo se necesitan dos ingredientes que todo el mundo tiene en casa: vinagre y bicarbonato. Ambos ingredientes son baratos, fáciles de conseguir y son muy efectivos para limpiar el desagüe de la cocina y del baño.
"Se dice que el fregadero de la cocina está más sucio que el inodoro, y eso incluye el desagüe"
"Se dice que el fregadero de la cocina está más sucio que el inodoro, y eso incluye el desagüe", explica la experta en limpieza Jill Koch, en declaraciones recogidas por el medio estadounidense especializado en hogar Southern Living. "Esta zona está expuesta a tanta comida que es susceptible a bacterias como la E. coli y la salmonela, por lo que es importante mantenerla limpia con frecuencia para que los platos se laven en un espacio limpio", añade sobre el fregadero.
Así, para utilizar el truco casero con el bicarbonato y el vinagre, lo primero que hay que saber es que no deben mezclarse estos dos ingredientes: "Es un error muy común, pero el bicarbonato de sodio y el vinagre, cuando se combinan, en realidad se anulan entre sí", explica Koch al citado medio. "Por lo tanto, puede producir una reacción efervescente satisfactoria, pero ninguno de los dos tiene ningún efecto cuando se combinan".
En lugar de utilizar bicarbonato de sodio y vinagre juntos, la experta sugiere utilizar uno y luego el otro. Así, basta con espolvorear bicarbonato de sodio en el desagüe, una media taza. Este se puede acompañar de un chorrito de jabón para platos. Después de dejarlo reposar unos minutos, se aclara bien con agua caliente.
Posteriormente, es el segundo paso, el del vinagre, que bastará con echar una taza de este líquido por el desagüe, dejándolo reposar en el fregadero o lavabo unos minutos. Después, se vuelve a aclarar con agua caliente: "En general, tanto el vinagre como el bicarbonato de sodio son excelentes métodos naturales para limpiar el desagüe".
En caso de que este truco no funcione, la experta en limpieza del hogar recomienda usar un limpiador enzimático: "Éstos contienen bacterias vivas que producen enzimas que comerán y descompondrán las partículas de alimentos", explica e indica que solo hay que seguir las instrucciones que marca la botella del producto.
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