El juez Adolfo Carretero, titular del Juzgado de Instrucción Número 47 ha admitido la denuncia contra Íñigo Errejón interpuesta por la actriz Elisa Mouliáa y le citará a declarar como investigado por un presunto delito contra la libertad sexual cometido en 2021.
El mismo juez recibió este lunes la confirmación por parte del Congreso de que Errejón ya no es diputado, lo cual le retira su condición de aforado y evita que se tenga que acudir al Tribunal Supremo.
De acuerdo con fuentes judiciales consultadas por Europa Press, el juez aún no ha fijado fecha para la declaración de Errejón, pero está previsto que escuche primero a la denunciante y luego al exdiputado.
Los hechos relatados por Elisa Mouliáa en su denuncia podrían costarle a Errejón una pena de prisión de entre un año y cinco años de cárcel.
A finales de septiembre de 2021
En la denuncia, Mouliáa relata hechos que tuvieron lugar una noche de finales de septiembre de 2021 cuando, después de que llevarán "aproximadamente un año" hablando por redes sociales, el político invitó a la actriz a la presentación de su libro.
Al terminar el evento, se fueron a tomar unas cervezas a un bar cercano y Mouliáa, que ya tenía previsto acudir esa noche a una fiesta en casa de un amigo, "por educación" le invitó a acompañarla. "Para sorpresa" de ella, Errejón aceptó.
De acuerdo con el relato de Mouliáa, ya en el coche él adoptó "una actitud dominante". Y en el ascensor directamente la habría agarrado "fuertemente" de la cintura y besado "de forma violenta", "dejándola sin respiración". Una vez en la fiesta y, tras bailar y charlar con los otros asistentes, la habría llevado "por la fuerza" a una habitación, donde se habrían producido varios tocamientos "sin el consentimiento" de la actriz.
Mouliáa describe en la denuncia que Errejón la quitó el sujetador, profirió frases "lascivas" del tipo "cómo me pones", acto seguido la empujó sobre la cama, se sacó su miembro y la hizo tocamientos.
"Paralizada", "fue en ese momento cuando le dijo que ella quería seguir en la fiesta". Errejón le habría contestado que "salía de la habitación con la condición de que en 20 minutos ambos tenían que irse a su casa". "Estuvieron un rato más en la fiesta", pero se trasladaron rápidamente en un mismo coche al domicilio del político.
Allí, "sin mediar palabra", él habría reanudado los tocamientos. Ella "le comentó que se estaba sintiendo muy incómoda", que lo que estaba ocurriendo le estaba pareciendo "muy violento". Y finalmente le dijo: "Íñigo, 'solo sí es sí', parece mentira que me esté pasando esto contigo", culminando ahí el relato plasmado en la denuncia.