Actualidad

El precio de una tasa turística para acceder a la Fontana di Trevi: "Hace falta una fórmula para otros puntos de la ciudad"

Fontana di Trevi /Foto: iStock

La excesiva afluencia de turistas hace que en ocasiones los gobiernos de las distintas localidades emprendan iniciativas para controlar el acceso a determinados lugares. En esta ocasión el foco se ha puesto en la capital italiana, concretamente en la Fontana di Trevi, usada como fondo por miles de influencers y turistas.

La entrada con un coste simbólico para acceder a esta emblemática fuente en Roma ha sido la idea planteada el concejal de Turismo de la ciudad, Alessandro Onorato: "me gustaría estudiar un nuevo acceso, contingente y cronometrado, con un sistema de reservas: gratuito para los romanos y de pago, con un euro simbólico para los turistas", detalló para el medio local al Corriere della Sera.

La estrategia, que en un primer momento puede generar controversia, ha sido muy bien aceptada por la Cámara de Comercio de Roma: "No sé si ésta es la mejor fórmula, pero hace falta una fórmula, no solo para la Fontana di Trevi, sino también para otros puntos de la ciudad, pasando del turismo vertical al horizontal", añadía el presidente de la cámara Lorenzo Tagliavanti. Esta práctica fue motivada por una idea "para dar a la gente la oportunidad de vivir la máxima experiencia posible. Roma es una ciudad que se vive lentamente, si lo ves de forma frenética no lo entiendes y no ves los edificios. Por tanto, debemos conseguir que el disfrute de Roma sea más ordenado en el centro histórico, y ofrecer muchas oportunidades que no se encuentran en el centro histórico".

La importancia cultural de Italia es muy notable, y los últimos estudios apuntan a que seguirá creciendo el número de visitantes. Desde el consistorio se expresó la necesidad de implementar una medida, ya sea una tasa u otra, para lograr un turismo más horizontal en más partes localizadas de la ciudad de Roma.

El conocido como sobreturismo es un problema a escala mundial. En verano es común encontrar lugares en los que no cabe ni un alma más, ya que las calles y monumentos están abarrotadas de gente. Desde el Parlamento Europeo se ha analizado el problema y plantean varias opciones para responder a esta práctica: "La mayoría de los destinos se gestionan sobre la base de un paradigma de crecimiento que valora, principalmente, el incremento del número de visitantes, sin tener en cuenta la capacidad de acogida y otros objetivos políticos. Las medidas adoptadas con más frecuencia para mitigar los efectos negativos del sobreturismo están relacionadas con el reparto de los visitantes en el tiempo y el espacio".

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky