El horno es un dispositivo que permite generar y almacenar el calor dentro de su compartimiento. Gracias a ello se permite asar, calentar o gratinar alimentos. Su función está clara, la de cocinar, por eso hay que evitar otros usos que le dan algunas personas, como el de almacenar objetos cuando está apagado.
Es común es algunos hogares que se use el horno para guardar elementos culinarios grandes como sartenes u ollas que ocupan mucho espacio en un cajón o armarios y se opta por usar el compartimento del horno que es más amplio.
Hay que evitar esta práctica debido a que las paredes del horno pueden dañarse en el momento de introducir y sacar objetos y a larga perjudicar el funcionamiento del dispositivo.
También hay que evitar utensilios con plástico en el horno
Si se usa el horno como armario y se estropea, puede que necesite reparaciones evitables. Otro daño puede ser que se dañe la puerta del horno, al ser objetos que se usan con frecuencia, lo normal es abrir y cerrar muchas veces la puerta, algo que puede hacer que esta pierda su ajuste con el paso de tiempo. Y si se rompe esta, el aparato ya no serviría al tener que estar cerrado para funcionar.
Otros elementos que hay que evitar meter en el horno son utensilios que estén hechos con plásticos porque pueden desprender pequeñas tiras de plástico derretido y verter partículas nocivas por todo el horno además de dañar el revestimiento y disminuir la eficacia del consumo de energía. También hay que evitar introducir papel y cartón al ser inflamables, pudiendo causar un incendio en casa.
Relacionados
- Cuál es la temperatura ideal del horno para preparar pollo asado
- ¿Para qué quiero que el horno o la nevera sean tan listos?
- Cómo limpiar el doble cristal del horno sin desmontarlo: trucos y remedios caseros
- Freidora de aire, horno, olla o microondas: qué electrodoméstico da mejor resultado para cocinar
