
Las falsificaciones están causando estragos en la economía española. Al año, los sectores de la confección, los cosméticos y los juguetes dejan de ingresar 1.511 millones de euros, un 6,7% de las ventas, y 15.044 puestos de trabajo se ven afectados por esta oleada de prácticas ilícitas. No hay, en cualquier caso, ningún sector que no se vea afectado por las falsificaciones, que tienen un coste total de 7.000 millones de euros.
Gerard Guiu, director general de la Asociación Nacional para la Defensa de la Marca (Andema) ha alertado hoy de "España es el país de la Unión Europea donde más falsificaciones se venden, solo por detrás de Bulgaria, según los datos hechos públicos hoy por la Euipo". Guiu ha puesto especial hincapié en una jornada organizada hoy en Madrid por Sicpa en que "la mitad de los jóvenes españoles compra falsificaciones de forma deliberada", por lo que la asociación está haciendo especial hincapié en tratar de llegar a ellos.
En Europa, las pérdidas en estos mismos tres sectores, asciende hasta los 16.000 millones de euros y más de 195.000 trabajadores. Cuando, según la EUIPO, el valor medio anual de las ventas de ropa en 2018-2021 fue de 230.000 millones; las de cosméticos superaron los 65.000 millones; y las de juguetes son de12.000 millones.
Aunque queda mucho por hacer, Andema aboga por intensificar el trabajo de los países de la UE de forma coordinada, especialmente en lo que a concienciación de la ciudadanía se refiere. En palabras Guiu: "si no hay demanda, se termina con la oferta".
Martín Sarobe, consejero delegado de Sicpa, una firma especializada en herramientas de identificación y autenticación, ha insistido durante su presentación en que "las diferencias de legislación en Europa donde hay unos países más permisivos que otros provoque que se estén creando unas puertas de entrada desde donde es mucho más accesible llegar al mercado único". Según sus cifras, las falsificaciones representan ya el 2% del comercio mundial y en España las pérdidas están aumentando por el aumento de los precios.
Enrico Frabetti, director de Política Alimentaria, Nutrición y Salud de la patronal alimentaria Fiab, ha alertado, por su parte del auge del fraude en el sector alimentario, especialmente en productos que han sufrido una fuerte subida de los precios, como el aceite de oliva.
Fraude con el aceite
La Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea estima, de hecho, que en Europa se produce un fraude cercano a los 1.500 millones de euros en torno al aceite de oliva. La escalada del precio de este producto ha creado el escenario perfecto para que mafias o mercados ilícitos aprovechen la coyuntura para introducir en los mercados productos adulterados.
La piratería digital pasa, por otro lado, una factura muy alta al sector audiovisual. En los últimos cuatro años, esta industria ha dejado de ingresar 9.119 millones de euros, lo que ha impedido la creación de casi medio millón de puestos de trabajo. Y todo ello ha supuesto, además, que las arcas públicas hayan dejado de recaudar 2.559 millones, según los datos del Observatorio de la Piratería y Hábitos de Consumo de Contenidos Digitales, elaborado por la consultora Gfk.
Ante esta situación, desde el grupo Mediapro demandan "más ayudas por parte de las grandes empresas tecnológicas, como Google o Apple. Además de más medios y medidas que vengan del Gobierno". En relación con esto, desde la Unión Europea han aprobado la Ley de Servicios Digitales que entrará en vigor dentro de unos meses y que permitirá cerrar portales en pocos minutos si emiten contenido ilegal.