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Así es la fragata Victoria, el buque de guerra español que acude a la protección del transporte marítimo global tras los secuestros de cargueros

Foto: Armada (Ministerio de Defensa).

Ya sea por los peligros "potenciales" de la piratería, o por los secuestros a cargueros a manos de rebeldes hutíes de Yemen, apoyados por Irán, en medio del conflicto entre Israel y Hamás, saltan las alertas por el golpe a la economía mundial que podría causar la escalada de ataques a embarcaciones en rutas marítimas de comercio. Una situación que ha hecho que varias navieras suspendan el envío de barcos comerciales a las rutas, además, de activar el desplazamiento militar español hasta las zonas de conflictos, como parte de la misión europea Atalanta contra la piratería.

En este contexto, sumado a todos los casos de ataques a embarcaciones internacionales que han ocurrido en el Mar Rojo, se suma el reciente secuestro en el mar Arábigo del buque búlgaro que lleva por nombre "Ruen".

Hablamos de un carguero de 45.000 toneladas, con 18 tripulantes de Bulgaria, Myanmar y Angola, que pertenece a la compañía estatal búlgara Navibulgar. Hasta el momento no se sabe a ciencia cierta qué grupo secuestró la embarcación, sumado a que fuentes del Ministerio de Exteriores de Bulgaria informaron a EFE de que no se ha podido establecer contacto con la tripulación del barco secuestrado ya que los teléfonos satelitales están "desconectados".

La enorme embarcación fue secuestrada el pasado jueves en aguas del mar Arábigo, a unas 380 millas náuticas al este de la isla yemení de Socotra, según confirmó el pasado viernes el Gobierno del país balcánico. "Tenemos información sobre el barco secuestrado y sobre ocho búlgaros a bordo", señaló Mariya Gabriel, ministra de Exteriores, a la televisión estatal BNT.

Para enfrentar esta situación, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Bulgaria ha formado un equipo especial para abordar la crisis y ha informado a sus socios de la situación, según ha informado la Agencia EFE.

Por su parte, el primer ministro búlgaro, Nikolay Denkov, en unas declaraciones desde Bruselas, indicó que se necesita "discreción" para llevar a cabo negociaciones. "Normalmente en tales casos es necesario que haya más silencio para que se lleven a cabo las negociaciones, todavía hay cierta incertidumbre sobre cómo se desarrollarán las cosas en los próximos días", declaró a la prensa.

La compañía naviera, en tanto, aseguró en un comunicado que "hay motivos para creer que actualmente no existe ninguna amenaza inmediata para la tripulación", con cuyos familiares ya se han puesto en contacto.

Una de las teorías apunta a que se podría tratar de un ataque a manos de los rebeldes hutíes. Y es que, en las últimas semanas han atacado a varios buques de carga y han advertido a las embarcaciones que eviten dirigirse a Israel.

La fragata Victoria y la misión EU Atalanta

Uno de los primeros países en prestar ayuda y protección al transporte marítimo global tras los secuestros de cargueros ha sido España. De esta forma, el buque de guerra fragata Victoria se dirigió a toda máquina a la zona donde eventualmente se encuentra el barco secuestrado, informó la misión europea Atalanta contra la piratería (es la operación de seguridad marítima de la UE en el Océano Índico Occidental y el Mar Rojo).

"Según la primera información disponible, el buque insignia 'ESPS VICTORIA' avanza rápidamente hacia el presunto buque secuestrado por piratas para ganar más conciencia y evaluar las siguientes acciones, también en coordinación con las Fuerzas Marítimas Combinadas (asociación marítima de 38 naciones con sede en Bahréin que lleva a cabo la lucha contra el terrorismo, la piratería y la cooperación regional)", señaló en su cuenta de X (antigua Twitter) la Fuerza Naval de la Unión Europea (EUNAVFOR).

La fragata Victoria es la segunda fragata de la clase 'Santa María' encuadrada orgánicamente en la 41ª Escuadrilla de Escoltas con base en Rota, formando parte de la estructura de la Fuerza de la Armada al mando del Almirante de la Flota, describe el Ministerio de Defensa de España en su página Web.

El buque de guerra fue construido en Ferrol (La Coruña), a mediados de los años 80. Lleva en servicio más de 30 años, pero durante su vida operativa se le han ido realizando las obras de modernización necesarias para incrementar sus capacidades originales y adaptarlas a las nuevas necesidades y cometidos demandados en el actual "escenario estratégico", agrega Defensa.

Protección al tráfico marítimo

Constituye una parte fundamental de la capacidad de protección de la Armada. Según destaca Defensa, inicialmente fue concebida para misiones eminentemente antisubmarinas como escolta de agrupaciones navales.

Sin embargo, los cambios experimentados en el entorno estratégico del siglo XXI han hecho, dada su gran "versatilidad" y variedad de capacidades, que desde su entrega a la Armada haya sido empleada en un amplio abanico de cometidos, tales como "apoyo en la proyección de una fuerza naval, protección al tráfico marítimo, operaciones de interdicción marítima, contra-piratería y salvamento así como vigilancia y escolta en teatros de operaciones alejados", sentencia el Ministerio de Defensa.

Registro de incidentes en 2023

En esta línea, el último informe del IMB, del periodo de enero a septiembre de 2023, revela un aumento en los incidentes de piratería y robo a mano armada reportados. De esta forma, en los primeros nueve meses de 2023 se denunciaron 99 incidentes de piratería y robo a mano armada contra buques, frente a los 90 incidentes registrados en el mismo período de 2022, detalla el documento.

En cifras, este año, 85 embarcaciones fueron abordadas, nueve tuvieron intentos de ataque, tres fueron secuestradas y dos fueron atacadas con disparos. Los perpetradores lograron abordar el 89% de los buques atacados y la mayoría de los incidentes ocurrieron de noche. "La IMB considera que la propiedad regional es fundamental para salvaguardar el transporte marítimo y el comercio y abordar estos crímenes", manifestó la entidad.

El informe de la IMB revela que las zonas más vulnerables de actos de piratería y secuestro se dan en el sudeste asiático, sobre todo, en el estrecho de Singapur. Otras áreas de preocupación incluyen América del Sur y Central, y los mares alrededor de Nigeria, Ghana y Angola.

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