
La investigación abierta en la Fiscalía Anticorrupción al fondo CVC Capital Partners y su director en España, Javier de Jaime, puede acabar salpicando a Garrigues. Según han confirmado fuentes próximas al proceso, el despacho de abogados, que trabaja desde hace años para el fondo, fue el encargado de diseñar la estructura por la que, tanto este como su primer ejecutivo, se enfrentan ahora a una multa de 90 millones de euros. Ambos consideran que todo se ha hecho de forma correcta y se han negado a firmar en conformidad el acta levantada por la Agencia Tributaria, que implicaba el pago de una multa de 90 millones de euros.
El entramado societario en el extranjero de CVC ha provocado que la Agencia Tributaria le haya impuesto una multa por supuesta elusión fiscal. En el caso del primer ejecutivo del fondo, habría declarado un bonus especial por el éxito del fondo—carried interest—como renta de capital, en vez de como renta de trabajo, como, según el Fisco, debería haber hecho. Hacienda decidió abrir una investigación en 2020 tras la apertura de una cuenta -que no es delito- el 7 de julio de ese año en la entidad suiza Banque Picted & Cie, con sede en Ginebra, por parte de Javier de Jaime, y que a 31 de diciembre de 2021 tenía un saldo de 38,42 millones de euros, según la documentación a la que ha tenido acceso este periódico. La cuenta está a nombre de la Compañía de Gestión e Inversiones Jade, la sociedad patrimonial del directivo, aunque la administradora única es su mujer, Ana Silvia Zubia Soldevilla.
El proceso es clave no solo para Javier de Jaime y CVC, sino para todo el capital riesgo en España, teniendo en cuenta las numerosas inversiones llevadas a cabo por el fondo. Por ello, y según ha adelantado El Confidencial, Javier de Jaime ha contratado ahora para su defensa a Javier Sánchez-Junco, abogado del rey emérito, e Ignacio Ayala, letrado durante el caso de Bankia. Sánchez-Junco ha estado durante más de dos décadas ejerciendo como fiscal en los tribunales de Madrid y de Asturias, además de en la Fiscalía General del Estado y el Tribunal Supremo. También ha trabajado para Banco Santander, defendiendo a Emilio Botín y a Ángel Corcóstegui. Dentro del sector de la banca se ha encargado de la defensa del presidente de La Caixa, Isidro Fainé.
La defensa de CVC y De Jaime se refuerza con Ayala, socio y fundador del bufete de abogados Olivia-Ayala. Entre los casos más sonados del letrado está la defensa a Rodrigo Rato tras la salida a bolsa de Bankia y la defensa de Iñaki Urdangarin en el caso Nóos. Aunque su bufete también ha defendido los intereses de Messi, exjugador del FC Barcelona.