
Laboral Kutxa obtuvo un beneficio neto de 150,5 millones en 2022, con un incremento del 38,36% respecto a 2021, ejercicio en el que obtuvo 108,7 millones. La actividad típicamente bancaria ha sido uno de los pilares principales para lograr estos resultados del ejercicio, según ha señalado la entidad cooperativa.
Laboral Kutxa ha subrayado que 2022 se ha desarrollado en un entorno macroeconómico "incierto y cambiante" y ha añadido que, superados los principales efectos de la pandemia, la guerra en Ucrania y su impacto en la inflación han mediatizado la política monetaria de los bancos centrales, provocando un tramo final del año caracterizado por una escalada de los tipos de referencia.
En este contexto, ha destacado en un comunicado que la entidad ha mostrado un "buen desempeño", con "una aportación equilibrada" de las principales parcelas del negocio.
Aportación cartera crediticia
El margen de intereses ha crecido un 17,13%, hasta los 280,8 millones, debido a la mayor aportación de la cartera crediticia como consecuencia de la variación en la curva de tipos, así como a los mayores ingresos por la actividad mayorista.
Los ingresos netos por comisiones también han aumentado un 4,3%, impulsados principalmente por los planes de previsión y pensiones y los fondos de inversión (+5,3%), así como por los medios de pago (+12%). En suma, el margen básico se ha situado en 406,9 millones, lo que supone un crecimiento interanual del 12,8%.
Por su parte, el margen bruto ha alcanzado los 448,2 millones, un 9,2% más respecto al ejercicio 2021, y ello a pesar de la menor contribución de las operaciones financieras, que han acusado la negativa situación de los mercados.
La cartera crediticia de Laboral Kutxa no ha evidenciado signos de deterioro. Tras el registro de la dotación extraordinaria por los posibles efectos de la pandemia en el ejercicio 2021, el apartado de dotaciones a provisiones, saneamientos y otros deterioros se ha cifrado en 14,75 millones.
Certifica su modelo cooperativo
Según ha apuntado la entidad, de manera sostenida desde hace varios años, Laboral Kutxa certifica la vigencia de su modelo cooperativo mediante una "posición financiera destacada", lo que "afianza la base sobre la que construir los resultados de los próximos ejercicios".
Laboral Kutxa ha añadido que así se refleja en las principales ratios e indicadores y, en lo referente a la solvencia, el CET1 se ha situado en el 22,24% a cierre de ejercicio, lo que mantiene a la entidad como "líder absoluta en su mercado de referencia".
El volumen total de la inversión crediticia de Laboral Kutxa se ha situado en 15.200 millones (+0,28%). En el caso de la inversión crediticia neta en las empresas, ha aumentado un 5%, fruto del mayor volumen de nueva financiación concedido por la entidad, que ha sido un 28% superior respecto a 2021.
Además, el 14% de la financiación a empresas se ha dirigido a destinos con impacto en la mejora medioambiental. Por su parte, la gestora de fondos de la entidad crece un 20% en volumen de clientes y su patrimonio se eleva un 7,8%.