Pese a contar con más de 70 años de historia, la OTAN ha vuelto a primera línea de la opinión pública a raíz del conflicto desatado entre Rusia y Ucrania. Una alianza militar entre 30 países que el presidente Vladimir Putin ha puesto en el foco de su decisión de ataque, por el interés del Gobierno ucraniano de formar parte de ella.
Tras el final de la Segunda Guerra Mundial, en 1949, y con el inicio de lo que posteriormente fue la Guerra Fría, Occidente vio con buenos ojos establecer una serie de lazos políticos en diferentes instituciones, con el claro objetivo de poner sus intereses por encima de los de la Unión Soviética. De esta forma surgió la Organización del Tratado Atlántico Norte (NATO, por sus siglas en inglés, o también conocida como Alianza Atlántica).
¿Qué es la OTAN?
Una organización militar cuyo objetivo claro era el de la defensa de alguno de sus integrantes ante un posible ataque externo. Surgida también ante la necesidad de llegar a acuerdos una vez la Unión Soviética, al igual que Estados Unidos, contaba con veto en las decisiones de la ONU, el 4 de abril se dio luz verde a esta unión entre el mismo Estado norteamericano, Canadá y otros diez estados europeos.
Una lista a la que se han ido sumando diferentes países, con España entrando en 1982 en una decisión refrendada en 1986, y que en los últimos años había venido perdiendo peso hasta que Rusia la ha vuelto a poner sobre el mapa. Y es que en su origen, la OTAN fue vital para la reconstrucción de Occidente así como para los intereses políticos, sociales y económicos durante la Guerra Fría.
Estas han sido las funciones de la OTAN desde la caída de la URSS
Sin embargo, con el fin de la Unión Soviética, los objetivos de la OTAN han ido variando hasta definirse en la actualidad como la "promoción de valores democráticos, la cooperación en cuestiones relacionadas con la defensa y seguridad y la resolución pacífica de controversias, aunque con la posibilidad de usar la fuerza militar en gestiones de crisis".
Con sede en Bruselas, diariamente cientos de expertos que conforman la OTAN "toman decisiones sobre asuntos de seguridad a todos los niveles", tal y como definen los propios estatutos de la organización, cuyo mando recae en Jens Stoltenberg (Noruega).
¿Qué países forman la OTAN?
Con incorporaciones a lo largo de los años, los diferentes objetivos de la OTAN han ido variando la entrada de unos y otros Estados miembro hasta ser en la actualidad una lista de 30 países, a los que Ucrania ha manifestado en varias ocasiones su deseo de unirse:
- 1949. Estados Unidos, Canadá, Bélgica, Francia, Reino Unido, Italia, Portugal, Países Bajos, Dinamarca, Luxemburgo, Islandia y Noruega.
- 1952. Grecia y Turquía.
- 1955. Alemania Occidental.
- 1982. España.
- 1999. Polonia, Hungría y República Checa.
- 2004. Bulgaria, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Letonia, Lituania y Rumanía.
- 2009. Croacia y Albania.
- 2017. Montenegro.
- 2020. Macedonia del Norte.
¿Por qué es relevante la OTAN en la guerra entre Rusia y Ucrania?
Han sido estas últimas adhesiones, más en concreto las producidas en 2004 sobre diferentes exrepúblicas soviéticas, las que han levantado el ánimo de Ucrania de formar parte de la OTAN y de Rusia de evitarlo. Considerando esta segunda a la primera una parte "cultural, sentimental y nacional en sus fronteras", Putin ha mostrado su rechazo constante a la entrada de Ucrania en la organización puesto que sería un ataque a sus intereses.
Y es que en los últimos años, el Parlamento ucraniano ha vuelto a iniciar los trámites de entrada en la OTAN, lo que se ha usado desde Rusia como excusa para la invasión de su territorio. Paralizadas entre 2013 y 2014 por el expresidente Yanukóvich, lo que provocó manifestaciones en todo el país de los ucranianos proeuropeos que derivaron en la Guerra de Crimea y del Donbás, desde 2017 Ucrania viene tomando medidas para adaptarse a las exigencias de entrada en la OTAN que derivaron en 2020 en la Estrategia de Seguridad Nacional, claro paso para el ingreso.
Sin embargo, la OTAN nunca ha llegado a proponer seriamente la entrada, que no ha pasado de ser un mero punto de debate, hasta que los ataques de Rusia no han hecho más que crecer la posición favorable a ello. En la última visita del secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, a Moscú, este advirtió de los "altos costes" de invadir Ucrania, por lo que Rusia respondió con una condición, ahora incumplida, que no era más que la OTAN no siguiese su expansión hacia el este.