
Llega el final de diciembre y la agenda de muchos empieza a echar humo. No es solo los cierres del año en empresas, la entrega de proyectos y el trabajo habitual. A ello se suma la compra de regalos, visitas de amigos y familiares, pensar el menú navideño, niños sin colegio...
Las personas que no tienen la posibilidad de coger vacaciones durante el periodo navideño suelen experimentar mayores picos de estrés al tener que compaginar la carga de trabajo normal, que a veces va a más también, con unas fechas con muchos compromisos sociales.
Diciembre, el mes del turrón y el estrés
Pero, por si alguien se desanima o piensa que es el único o única al que le pasa, al menos puede consolarse de que no está solo o sola. Una investigación llevada a cabo en 2016 ya mostraba que diciembre es el mes más estresante para los trabajadores y en el que más se reduce su productividad.
En la encuesta, realizada por la empresa de seguros MetLife, recogía que para el 42% de los encuestados diciembre era el mes más estresante y también en el que se producían más síndromes de 'burnout', la ansiedad ligada con el exceso trabajo que en muchos casos acaba provocando que un trabajador deje su empleo.
Al parecer viene provocado por la necesidad de conciliar las responsabilidades laborales con la vida familiar y el hecho de que algunos compañeros se tomen las vacaciones antes de que acabe el año, fueron señalados como las principales causas de estrés.
Gestionar y prevenir la acumulación de estrés es importante por lo tanto en estas fechas, donde se juntan de seguido varias semanas con festivos en los que a menudo no baja la carga de trabajo.
Otro estudio realizado por la empresa de catering Avenance en 2005 reveló que el 68% de los trabajadores eran menos productivos durante el mes de diciembre. Casi la mitad de los trabajadores admitieron en una encuesta que hacían entre un 10 y un 20% menos de trabajo, mientras que 1 de cada 6 producía entre un 20 y un 30%.
Cómo prevenir que esto ocurra
En estos mismo informes las empresas promotoraa coincidían al señalar consejos para sobrellevar estas fechas si coincide con mucho trabajo: tener cierta pausa por la mañana antes de empezar el trabajo, y mantener vivos y encontrar espacio para ocupaciones como la lectura o practicar ejercicio.
Estas actividades deben ser "no negociables", ya que contribuyen a mantener cierta rutina en un momento en el que es escasa. Marcar una lista de tareas clara y decir no a nuevas obligaciones que puedan surgir por el camino es importante en fechas como estas también.