
Comprar una vivienda se ha convertido en los últimos años en una ardua tarea debido a los elevados costes que ha fijado el mercado. Sin embargo, existe una posibilidad a cargo del BOE que reduce considerablemente el precio y facilita el acceso a estas. Eso sí, subasta mediante, estas casas además tienen la particularidad de que han sido intervenidas, embargadas y decomisadas a organizaciones criminales.
El BOE, a través de a Oficina de Recuperación y Gestión de Archivos (ORGA), dispone de alrededor de 250 viviendas, fincas, parcelas o garajes disponibles por toda la geografía española. Con mayor presencia en Madrid, donde se encuentra casi un 85% de la oferta, las opciones también están en Tenerife, Baleares, Barcelona, Tarragona, Alicante, Málaga, Toledo, Pontevedra o Vizcaya.
Unos muebles bienes a los que se accede mediante subasta con el fin de reparar el daño a víctimas de organizaciones criminales. Y es que este es el principal rango de actuación de la ORGA, dedicarse a gestionar todas las intervenciones de estos grupos delictivos.
Las ofertas van desde una casa por 60.000 euros hasta una finca por 400.000 euros
De esta forma, también se descarga de gestiones a las autoridades judiciales, así como se reduce el gasto de estas actuaciones y se fortalece a las autoridades que luchan para acabar con los criminales. Todo a través de esta subasta directa que deja viviendas a un precio muy reducido.
Así, se puede adquirir desde una casa de 60 metros cuadrados, en Pontevedra, por algo más de 60.000 euros hasta una parcela de 360 metros cuadrados, en Mahón, por alrededor de 400.000 euros. Siempre otorgando la propiedad al mejor postor, el sistema de la ORGA permite, incluso, ofrecer menor cantidad de la marca inicialmente.
¿Cómo se puja por esta viviendas?
Para poder optar por uno de estos bienes muebles basta con registrarse en la administración como si de cualquier otra gestión se tratase (mediante usuario, certificado electrónico o cl@ve), para después acceder al portal de subastas del BOE.
Aquí habrá que diferenciar las propias de la ORGA, que son de intervenciones a organizaciones criminales mientras que el resto se debe a bienes requisados por impagos o deudas con la administración, para después seleccionar la provincia deseada. Cada territorio muestra las opciones de pujas que tiene en el momento, así como toda la información catastral relativa a cada vivienda, finca o garaje.
Una vez dentro, habrá que seleccionar el bien por el que se desea optar, donde se podrá ver si tiene alguna carga más allá del pago inicial, en qué estado está y cuándo finaliza la puja. Una vez se resulte ganador, se otorgará la nueva propiedad, pasando a ser el nuevo dueño en cuestión.
Una forma de acceder a una vivienda de bajo coste, al tiempo que se minimiza el daño a víctimas de de delitos. Eso sí, con la oscura historia detrás de para qué sirvió tal bien, queda a interés de cada ciudadano si optar o no por pasar a residir en tal lugar.