Contrato de arras: ¿Es obligatorio dar un 10% para comprar una vivienda?

A la hora de comprar una vivienda, sobre todo si es la primera vez, pueden surgir muchas dudas. Una de ellas está relacionada con la firma de un contrato de arras entre comprador y vendedor, que es uno de los primeros pasos a dar.

El contrato de arras es un acuerdo privativo que tiene como finalidad asegurar el compromiso por ambas partes de realizar la compraventa de la casa y firmar el traspaso ante notario, es decir, asegurar que se lleva a cabo la operación de compraventa.

En el momento de la firma del contrato de arras, el comprador entrega una cantidad de dinero por adelantado para hacer la reserva definitiva de la vivienda. Esta cantidad se descuenta del precio final de compraventa y, por tanto, también de la hipoteca. Además, si alguna de las partes se echa para atrás sin motivo de peso, habrá consecuencias.

Según explica el director de Hipotecas del comparador y asesor hipotecario iAhorro, Simone Colombelli, "la más común y utilizada en España es que si es el comprador el que se arrepiente, pierde la señal; pero si es el vendedor; debe devolverle al comprador el doble de lo recibido".

¿Cuánto dinero se aporta en el contrato de arras?

"No existe ninguna ley que establezca qué porcentaje o importe se debe entregar a la hora de firmar arras, aunque lo normal es que se entregue un 10% del precio de compraventa de la vivienda, se puede dar un 5% o un 15% si así lo acuerdan las partes", agrega Colombelli. Es cierto que el pago de un 10% del precio de compra es una práctica muy extendida, que se aplica a la mayoría de las operaciones inmobiliarias, pero que puede variar en función del acuerdo alcanzado y del nivel de compromiso o riesgo que quieran asumir comprador y vendedor.

Entonces, ¿por qué se suele pactar un 10%? El portavoz de iAhorro cree que es más por una cuestión de "costumbre y facilidad a la hora de calcular la cantidad que se va a entregar" y también porque "ese 10% suele suponer una cantidad significativa, que hace que tanto comprador como vendedor cumplan con el compromiso firmado y reduce el riesgo de que alguna de las partes se eche para atrás después de firmar el contrato de arras".

¿Qué debe incluir un contrato de arras?

El contrato de arras no es un documento obligatorio, pero tiene una gran utilidad y suele ser habitual que tanto comprador como vendedor quieran firmarlo para comprometer a la otra parte en la operación de compraventa.

Tanto es así que, en la práctica, resulta recomendable para las dos partes debido a que el proceso de compraventa suele dilatarse en el tiempo. Incluso puede firmarse ante notario, aunque si no se hace también es completamente válido.

Entre las condiciones que se reflejan en este contrato de arras está el plazo máximo para proceder a la escritura de compraventa. Desde iAhorro recomiendan no firmar nunca un contrato de arras sin fecha límite y establecer, como mínimo, un periodo de 90 días a partir de la firma de este contrato por los imprevistos que puedan ocurrir. No obstante, este plazo es totalmente negociable.

En el contrato de arras también se debe identificar claramente la vivienda objeto de compraventa, el precio al cual se vende tiene que estar expuesto de forma clara y bien desglosado, la forma de pago también debe incluirse, así como la cantidad entregada en concepto de arras y se debe adjuntar al contrato el documento que justifique el pago, entre otras cosas.

Otra de las cláusulas que se pueden incluir, como recomienda el director de Hipotecas del comparador hipotecario, es una "que asegure la devolución de las arras en caso de que ningún banco le conceda la hipoteca al comprador". Esta cláusula protege al comprador al permitirle recuperar la cantidad depositada si no logra obtener la financiación necesaria para la compra.

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