
A la hora de recibir una herencia, es muy frecuente que uno de los bienes a recibir sea una vivienda que, después, se puede vender, no sin antes tener en cuenta que las herencias están sujetas a impuestos, al igual que los beneficios obtenidos por la venta de esa casa.
En concreto, cuando se recibe una casa en herencia, el bien queda sujeto al Impuesto de Sucesiones y Donaciones, que debe pagarse en un plazo de seis meses desde el fallecimiento del propietario de la vivienda.
Por otro lado, cuando el nuevo propietario de esa vivienda, obtenida mediante una herencia, decide vender la casa debe saber que deberá pagar el porcentaje correspondiente de IRPF, ya que esos ingresos obtenidos son ganancias patrimoniales.
En estos casos, el porcentaje de IRPF se pagaría a la hora de hacer la declaración de la renta de ese mismo ejercicio, es decir, si se vendió un piso en el 2022, el contribuyente lo debería declarar en la campaña que se ha iniciado en este mes de abril de 2023.
¿Cuánto hay que pagar de impuestos por vender un piso heredado?
Al vender un piso, los ingresos conseguidos pasan a ser beneficios patrimoniales, lo que queda sujeto al pago del correspondiente porcentaje de IRPF. En concreto, el pago del impuesto funciona por tramos según la ganancia obtenida, por lo que a una parte de los ingresos se le aplicará un mayor porcentaje y, al restante, otro menor.
Los tramos estipulados por Hacienda para el pago del IRPF por vivienda heredada son los siguientes: hasta 6.000 euros de beneficio, 19%; de los 6.000 hasta los 50.000 euros, 21%; de 50.000 a 200.000 euros, 23%; de los 200.000 a los 300.000 euros, 27% y para ganancias a partir de 300.000 se tributará un 28%, tal y como indica Idealista.
Esto quiere decir que, por ejemplo, si se consigue una ganancia de 40.000 euros por vender una casa heredada, habrá que pagar en impuestos un 19% de los primeros 6.000 euros y, a los 34.000 euros restantes se le aplicará un 21%.
Valor de adquisición y valor de transmisión
También hay que saber que, a la hora de calcular el porcentaje de IRPF al vender un piso heredado, habrá que tener en cuenta el valor de adquisición y el valor de transmisión, es decir, el valor fijado por el Impuesto de Sucesiones y lo que se ha ganado con la venta, respectivamente.
Por un lado, el valor de adquisición de una vivienda heredada es aquel que se muestra como base en Impuesto de Sucesiones, al cual se pueden sumar todos los gastos asociados a ello, como el gasto de notaría o de cambio de registro, entre otros. Tras sumar esos gastos, el valor que se obtiene es el de adquisición.
Por otro lado, está el valor de transmisión, que no es más que la ganancia neta obtenida por la venta de la vivienda. Así, a la cifra habrá que restarle todos los gastos que hayan derivado de la venta de la vivienda. En el caso de que la cifra resultante sea positiva, esas ganancias netas habrá que declararlas por el IRPF.