El "ninguneo" a la Comunitat Valenciana en el reparto de la inversión territorializada en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2017 supone un freno a su potencial de crecimiento y un lastre de cara a su competitividad futura, tanto en España como en la Unión Europea, según el empresariado de la región.
A pesar de que la Comunitat ha tenido una evolución del PIB y el empleo superior a la media nacional en los últimos años, siendo uno de los puntales de la recuperación española, los PGE reducen la inversión en la región un 33 por ciento -frente al 22 por ciento de recorte total-, hasta 589 millones, el 6,9 por ciento del total, muy por debajo de su aportación al PIB nacional, que supera el 10 por ciento. La región queda en la cola en ratio por habitante, con 119 euros, frente a 185 de media.
Los empresarios consideran un "error táctico" la falta de voluntad negociadora de las fuerzas que gobiernan la región, PSPV y Compromís, "que nos ha hecho perder una oportunidad que sí han aprovechado PNV, Coalición Canaria y los partidos catalanes. Falta visión estratégica y a largo plazo", critica Salvador Navarro, presidente de la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), la patronal autonómica.
"Falla un factor clave, y es que no tenemos políticos valencianos donde se toman decisiones: los Ministerios. Las infraestructuras son necesarias, pero, por buena voluntad política que se tenga [en referencia al ministro de Fomento, Íñigo de la Serna], lo que no está en los Presupuestos, no existe", avisa Vicente Boluda, presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE).
"Es hora de actuar y reivindicar, porque el ninguneo a la Comunitat es constante en el tiempo, da igual el del partido que gobierne", afirma Manuel Espinar, copresidente de la Confederación de Empresarios Turísticos de la Comunitat.
Más de 7.000 millones
La Federación de Contratistas de Obra Pública (Fecoval) -uno de los sectores más afectados- cifra el déficit acumulado en infraestructuras del Estado en la Comunitat en los últimos 10 años en más de 7.000 millones. "No se entiende que en un periodo de recuperación, según el Gobierno, se planteen unos Presupuestos tan restrictivos, y menos aún que el peso de la restricción recaiga sobre unas pocas regiones, creando un agravio comparativo inevitable. Es competencia desleal, porque se beneficia a otros territorios", denuncia su presidente, José Luis Santa Isabel. En esta línea se pronuncia Perfecto Palacio, presidente del Instituto de Estudios Económicos de Alicante (Ineca): "Los PGE son un varapalo sin paliativos en términos de vertebración del territorio. Alicante, la quinta provincia por PIB, es la 43 por inversión".
Propuestas serias y rigurosas
Las principales reivindicaciones en infraestructuras se centran en dos grandes ejes: conectividad y transporte -entre ellas, los corredores ferroviarios Mediterráneo y Cántabro-Mediterráneo y la inversión en puertos- y las estructuras hidráulicas, sobre todo, en Alicante.
"Ahora poco podemos hacer, porque dependemos de las enmiendas. Hay que trabajar ya de cara a los PGE de 2018. La inversión en la Comunitat beneficia a toda España y las organizaciones tenemos que trasladar informes rigurosos y propuestas serias a Generalitat y Gobierno central", dice Navarro, que cita como ejemplo el estudio sobre el Corredor ferroviario Cántabro-Mediterráneo, que ha asumido Adif.