Las medidas proteccionistas que quiere implantar el Gobierno de Donald Trump en Estados Unidos tendrán efectos positivos en cuanto a crecimiento de la economía del país a corto plazo, pero a medio y largo plazo las consecuencias serán negativas, según los expertos que han participado en el certamen de finanzas y seguros Forinvest, que se celebra en Feria Valencia. Los ponentes auguran, a partir del tercer o cuarto año, aumentos en tipos de interés, inflación, déficit de la balanza comercial y nivel de endeudamiento, y pérdidas en su competitividad y en su posición de liderazgo en Occidente.
"Trump no puede abordar la subida del 10 por ciento en los aranceles que plantea de forma unilateral. Tiene que ser respaldada por las diferentes instancias de control en Estados Unidos y, si prospera, la Organización Mundial del Comercio tendrá que actuar en consecuencia, puesto que supondrá una ruptura de los acuerdos globales", dijo Vicente Mompó, director del Departamento Internacional de la Cámara de Comercio de Valencia, que añadió que puede llevar a medidas reactivas por parte de otros mercados y de multinacionales.
En esta línea, el director de Comercio Exterior de Banca de Empresas de Bankia, Luis Galiano, recordó que Estados Unidos es una economía "muy dependiente de las importaciones" en sectores como energía, maquinaría o transporte.
"Ya veremos qué piensan las multinacionales norteamericanas del aumento de la restricción a las importaciones de productos que fabrican en otros mercados", destacó Mompó. A corto plazo, no cree que la política de Trump afecte a las inversiones de estos grupos en el exterior, "ya que las decisiones de inversión no se toman a un año, ni a dos o tres".
Eduard Navarro, socio fundador de la gestora de inversiones NdG, considera que se trata de propuestas "anacrónicas" y confía en que el "equilibrio" entre poderes en Estados Unidos suponga el bloqueo de este tipo de medidas, que, de aprobarse, "supondrán un cambio en la economía a nivel global. Los países europeos tendrán que plantearse unas maneras de trabajar que no se han planteado en años y, de repente, China aparece como la principal defensora de la liberalización de los mercados".
Mompó recordó que "más del 50 por ciento del déficit comercial americano está ligado a China".
Empresas "más americanas"
El directivo de la Cámara de Valencia señaló que hay unas 1.200 empresas españolas instaladas en Estados Unidos, de las que en torno al 10% son de la Comunitat Valenciana. Asimismo, indicó que este mercado es el primer destino de los productos valencianos fuera de la Unión Europea y el cuarto país después de Alemania, Francia y Reino Unido. Mompó considera que las empresas españolas han logrado una posición "competitiva", por lo que espera un impacto limitado en su exportación. "Va a afectar más el Brexit que Trump", afirmó.
"Trump está gobiernando a golpe de Twitter y sigue haciendo campaña, pero detrás tiene gente moderando su discurso para bajarlo a la realidad", subraya.
