
La Policía Nacional ha lanzado un importante mensaje a toda la ciudadanía, por una de las estafas más comunes durante los meses de verano, en relación a los alquileres vacacionales: "Alquilas una vivienda vacacional y cuando llegas no existe". Con el fin de evitar este tipo de estafas, la propia Policía lanza una serie de pasos a seguir, para identificar anuncios fraudulentos.
En primer lugar, la recomendación principal es acudir siempre a páginas certificadas, ya que disminuye considerablemente la probabilidad de encontrar anuncios fraudulentos en ellas, sin embargo, también se aconseja tomar otras precauciones por si acaso. Realizar siempre el pago a través de estas páginas es también otra garantía de que todo es correcto.
Paralelamente, es importante prestar atención a los precios de las viviendas: "Si es demasiado bueno para ser verdad, probablemente no lo sea. Pone un precio excesivamente bajo para atraer a más víctimas". Por ello, conocer los precios de la zona, nos ayudará a no caer en estafas.
La escritura y ortografía son también alertas frente a anuncios falsos, ya que tienden a tener faltas o fallos ortográficos. Generalmente, los anuncios reales sí están bien escritos, con frases completas y redactadas correctamente.
Respecto a las fotografías usadas, suelen ser robadas de anuncios que sí son reales, por lo que es esencial realizar búsquedas en Google para comprobar si corresponden con el anuncio y la ubicación proporcionada. Para corroborar esta información se puede pedir al propietario que realice una videollamada desde el alojamiento: "Si no quiere, sospecha".
Por último, guardar tanto las conversaciones con el propietario, como los justificantes de pago, para poder denunciar ante la Policía en caso de ser víctimas de una estafa en un alojamiento vacacional.