Bilbao
Aernnova, fabricante alavés de estructuras aeronáuticas, elevó un 18% su facturación en 2023 hasta los 875 millones, desde los 740 millones logrados el año anterior. Este ejercicio aspira a alcanzar los 1.000 millones de volumen de negocio, aunque su rentabilidad sigue afectada por el alza de costes y la tensión en la cadena de suministro.
El grupo aeronáutico vasco acabó el pasado año superando sus objetivos iniciales en cuanto aumento de la facturación y logró subir este cifra casi un 20%. No obstante, el ejercicio terminó con el cierre de su planta de Sevilla que tenía 120 trabajadores. Aernnova también 'sorteó' a principios de 2023 un Erte en la fábrica de Berantevilla (Álava), motivado por la falta de suministros, que habría afectado a 242 trabajadores.
Por el lado positivo, el fabricante alavés anunció dos importantes colaboraciones tecnológicas. La primera, para el desarrollo del avión de nueva generación supersónico, denominado 'Overture', de la compañía norteamericana Boom Supersonic, donde participará en el diseño y desarrollo del ala. El grupo que preside Iñaki López Gandásegui fue seleccionado por su conocimiento de materiales compuestos avanzados.
Además, Aernnova toma parte en el diseño del ala, el diseño y fabricación de los 'flaps', alerones y 'spoilers', y la fabricación del conjunto de estabilizadores que se encuentran en la cola del nuevo avión ligero de Honda Aircraft. El HondaJet 2600 Concept será un avión ligero que Honda espera comercializar a partir de 2026 y transportará a un máximo de 10 viajeros.
Aernnova, con cerca de 5.000 trabajadores, tiene 16 centros repartidos en siete países. Fabrica para más de 30 modelos de aeronaves de Airbus, Boeing, Embraer, Bombardier, Sikorsky, y Northrop Grumman. Cuenta con instalaciones en España, Reino Unido, Rumanía, Estados Unidos, Brasil y Portugal, donde compró dos plantas a Embraer en 2022.