
El grupo IAG empieza a asignar funciones a la nueva filial de handling diseñada por Iberia para resolver el conflicto con los sindicatos tras perder la licencia de operador de rampa en siete de los grandes aeropuertos españoles. La nueva firma, de la que se siguen negociando detalles, se encargará de realizar los servicios de asistencia en pasaje a dos de las grandes aerolíneas del grupo: la británica British Airways y la irlandesa Air Lingus.
El grupo aeronáutico confirma así una de las líneas de trabajo propuestas en la negociación con los sindicatos para garantizar el negocio de esta subsidiaria de nueva creación, aprovechando que el handling de pasaje ya estaba liberalizado y que no se requiere de licencia de Aena para llevar a cabo estas actividades.
En coincidencia temporal, este mismo miércoles Iberia ha puesto en marcha un proceso de movilidad interno para recolocar a los trabajadores de handling de los aeropuertos de Málaga, Alicante, Barcelona, Bilbao, Palma de Mallorca e Ibiza, todos ellos en los que ha perdido las licencias. Esta "oferta de recolocación voluntaria" estará abierta hasta el 27 de febrero en la mayor parte de instalaciones, aunque en otros casos se cerrará antes, los días 23 o 26.
Los servicios de handling de pasaje que tiene encargados Iberia Airport Services y que replicará la nueva filial —todavía sin nombre— contemplan las operaciones de facturación, embarque y coordinación de operaciones. Adicionalmente, también se llevan a cabo otras como la solución de incidencias sobrevenidas (por sobreventa, cancelaciones, pérdidas de conexión, desvíos de vuelos, etc.), búsqueda de equipajes demorados y otros servicios especiales.
Estos difieren sustancialmente de los servicios de handling de rampa, esenciales para garantizar la eficiencia y la seguridad en los aeropuertos. Estos incluyen la carga, descarga y clasificación de equipajes y mercancías, la supervisión de la seguridad de los pasajeros mientras embarcan o desembarcan del avión, o la limpieza del interior y exterior de las aeronaves, entre otras funciones. Estarán prestados por los nuevos adjudicatarios, entre los que se encuentran Menzies, Swissport, Aviapartner, Globalia o WFS, pero también la propia Iberia Handling en varios aeropuertos donde sí ha renovado su licencia.
Un conflicto enquistado durante dos meses
El pasado 2 de febrero, los sindicatos aceptaron el ultimátum dado por la empresa para resolver el conflicto laboral abierto entre ambas partes tras perder las licencias de handling de rampa en siete de los diez grandes aeropuertos españoles, entre los que se sitúan Barcelona-El Prat, Palma de Mallorca, Málaga, Gran Canaria o Tenerife Sur.
El acuerdo contempla la sustitución de Iberia Airport Services por una nueva filial, propiedad del grupo al 100% y con mayoría del accionariado en manos de Iberia, que ofrecerá autohandling a las aerolíneas del grupo y prestará servicios a terceros. También conlleva la salida de 1.727 trabajadores mediante un ERE voluntario que afectará a trabajadores que tengan más de 56 años con bajas incentivadas y prejubilaciones voluntarias.
El resto de trabajadores que no sean subrogados a las nuevas concesionarias pasarán a formar parte de manera automática de la nueva empresa, conservando sus condiciones actuales y derechos laborales, incluidos los sistemas de profesión y antigüedad. La nueva sociedad sumará más de 6.000 empleados y aspira a lograr "ambiciosos objetivos de crecimiento nacional y vocación de desarrollo internacional" por Europa y América.