
Medway tiene prisa por cerrar su sociedad conjunta con Renfe. La operadora ferroviaria portuguesa, elegida socia industrial de la empresa pública española para tratar de reflotar el negocio de mercancías por tren, espera poder alcanzar un acuerdo definitivo antes del mes de abril, aseguró el presidente de la compañía lusa, Carlos Vasconcelos, a la agencia de noticias Lusa. "Dentro de tres meses tendremos el proceso culminado, si llegamos a un acuerdo en todo", declaró.
El máximo ejecutivo de la filial ferroviaria de la naviera MSC confirmó que ambas compañías están todavía negociando las condiciones para llevar a cabo la fusión operativa de ambas compañías, opción por la que se inclinan sus cúpulas directivas para tratar de agilizar el proceso. "Estamos negociando cómo se procesa, qué activos se transfieren, cual es su valor y cómo se gestionarán", aseguró Vasconcelos, a la prensa portuguesa en la presentación de nuevas locomotoras.
Tal y como adelantó elEconomista.es, tanto Renfe como el grupo MSC arrancaron la due diligence necesaria para conocer la situación real de ambas empresas, incluida la valoración de activos de la empresa pública española, pendiente de ejecutar desde hace varios años. Según Vasconcelos, estas negociaciones estarían avanzando "con cierta rapidez", aunque en caso de que este acuerdo no se concrete, Medway continuará con su plan actual.
"Si no podemos llevar el tren a un buen muelle o estación, en este caso seguiremos solos", expresó, añadiendo que Medway será, "con o sin Renfe, el mayor operador ferroviario de transporte de mercancías de la Península Ibérica y uno de los principales actores europeos". Su estrategia incluye la puesta en marcha de tráficos con origen y destino Francia para el año 2025.
Desde España dudan de los plazos
Al otro lado de la 'raya' ven difícil que este acuerdo pueda cerrarse en el plazo señalado por Vasconcelos. Preguntados por esta situación, desde Renfe no indican ningún plazo y aseguran que el proceso continúa su curso, pero que en cualquier caso, la decisión definitiva está en manos del Consejo de Ministros, que deberá dar el visto bueno al acuerdo de asociación.
Desde MSC España también descartan confirmar ningún plazo a la espera de que esta operación llegue a Moncloa: "Desconocemos porque se han realizado estas declaraciones desde MSC Portugal, ya que hasta que el acuerdo no pase por Consejo de Ministros no podemos mencionar ningún plazo", aseguran.
Fuentes próximas al Ministerio de Transportes también expresan su sensación de que los tres meses dados por el presidente de Medway son "poco tiempo", dada la necesidad de finalizar la due diligence y de que el Ejecutivo español dé el visto bueno definitivo.
Para avanzar en la asociación de ambas compañías, el Gobierno de Portugal aprobó a mediados de diciembre la venta del 5% del capital social de Medway a sus trabajadores, a un precio de 0,068 euros por acción.
Hoja de ruta definida
Aunque los planes iniciales de Renfe hablaban de constituir una nueva sociedad mixta coparticipada por ambos socios, la necesidad de acortar el plazo necesario para poner en marcha la sociedad habría virado la estrategia prevista por la operadora pública, de forma que la nueva empresa mixta podría acabar siendo la propia Medway.
Los extensos plazos burocráticos necesarios para conseguir la licencia de empresa ferroviaria y el certificado de seguridad en España y Portugal, estimados en unos dos años, habrían invitado a ambas partes a desechar la creación de una joint venture que realizase esta labor, según fuentes próximas al procedimiento.
Así, Renfe transferiría buena parte de la actividad de su filial de Mercancías, los activos disponibles (locomotoras y vagones) y el personal que quiera formar parte de la misma a la operadora ferroviaria de MSC a cambio de entrar en su capital social de manera proporcional al total de activos aportados, sin que de momento se haya concretado el porcentaje para ejecutarlo.
Esta operación, con la que ambas sociedades pretenden constituir el principal operador ferroviario del sur de Europa para competir en el resto del continente, no supondría la desaparición definitiva de Renfe Mercancías, que podría continuar operativa para llevar a cabo tráficos estratégicos en España, como los trenes militares.