
El Grupo Barceló terminó 2022 con 277 hoteles en cartera repartidos en 25 países en Europa, América Latina, Estados Unidos, África y Oriente Medio que suman cerca de 62.000 habitaciones, lo que la convierte en la segunda hotelera española detrás de Meliá. Unos datos que quiere seguir incrementando en el corto plazo.
Entre sus planes de expansión y de consolidación está abrir 28 nuevos proyectos, así como entrar en varios nuevos mercados como China, Tanzania y Cabo Verde, entre otros, según consta en el programa de pagarés remitido al Mercado Alternativo de Renta Fija (MARF). "Estamos valorando también seguir creciendo en otros destinos del sudeste asiático como Tailandia, un país estratégico para la expansión de la compañía por su enorme potencial turístico", explica el grupo hotelero a este medio.
China es un mercado que lleva años resistiéndose al grupo balear, hasta tal punto que ha estado cerca de desembarcar en varias ocasiones, pero sus planes siempre han acabado frustrándose. Fue en 2016 cuando firmó un acuerdo de franquicia con Plateno, uno de los principales grupos hoteleros del país asiático, para aterrizar allí y tan solo un año después rubricó el primer proyecto hotelero. Sin embargo, estos planes no terminaron de materializarse después de que el gigante Jin Jiang comprara Plateno y frenara los planes de la española.
Tras ello, se alió con Betterwood y en enero de 2020 parecía que la apertura en el país estaba más cerca que nunca, pero la irrupción de la pandemia volvió a frenar sus planes en China.
Según la documentación remitida al MARF, Barceló quiere retomar sus planes en China, aunque alerta de que estos están sujetos al incremento en la regulación del negocio en dicho país que podría limitar su expansión. "El Grupo Barceló no puede predecir la forma en que cualquier cambio en la normativa pueda afectar a sus actividades, resultados y situación financiera", explica al respecto.
Su estrategia por apostar por Asia en general y por China en particular emula a una de sus principales competidoras, Meliá. La hotelera de la familia Escarrer es la española con mayor presencia en la región de Asia Pacífico. Según consta en el informe relativo a los resultados de los nueve primeros meses del año, esta región representa el 12,2% de su porfolio y de cara a los próximos meses va a protagonizar el 19,5% de las nuevas aperturas frente al 16,6% de España o el 13% de América.
Hasta la fecha, la estrategia internacional de Barceló ha estado muy centrada en ganar peso en el norte de África. Solo en Marruecos cuenta con seis establecimientos en sus principales ciudades, Casablanca, Agadir, Fez y Tánger y en Túnez otros seis. Si todo va según lo previsto, a estos activos en el continente africano se sumarán cuatro nuevos hoteles en Cabo Verde y uno más en Tanzania, según explica el grupo en su memoria anual.
Destinos recién inaugurados
Crecer en nuevos destinos es una de sus principales apuestas de los últimos años. De hecho, este verano ha abierto su primer hotel en Maldivas, el Barceló Whale Lagoon Maldives, un resort de 5 estrellas y 100 villas de lujo ubicado en la isla de Bodufinolhu, en el atolón Ari del Sur, a unos 110 kilómetros de Malé, la capital de Maldivas. Además, tiene previsto abrir un nuevo hotel urbano en Malé en 2024, así como desarrollar un complejo de tres hoteles de 5 estrellas en el atolón North Male.
Un año antes, en agosto de 2022, el grupo balear inauguró su primer hotel en Indonesia ubicado en un edificio de 32 plantas. Este activo cuenta con 153 habitaciones divididas en ocho categorías y distribuidas en 12 plantas.
En Europa también ha entrado en nuevos destinos este verano. En el mes de julio abrió su primer hotel en Polonia, el Barceló Warsaw Powi?le. Se trata de un establecimiento de 151 habitaciones ubicado en el centro de Varsovia. Además, dos meses después, entró en Eslovenia con un hotel, el Occidental Ljubljana, de cuatro estrellas y con 148 habitaciones y suites.