
Tras un verano de récord e iniciado el programa de invierno, el de menor actividad para el sector aéreo, las aerolíneas europeas han evidenciado que 2023 ha vuelto a ser un año sin precedentes para su negocio. La suma de las siete principales compañías europeas por volumen de ingresos y pasajeros arrojan unas cifras que baten en todos sus indicadores a las previas a la pandemia -con muy pocas excepciones- y a las del pasado 2022, ejercicio que ya entonces supuso un hito en la recuperación del sector. Así, IAG, Lufthansa, Air France-KLM, Ryanair, EasyJet, Wizz Air y Turkish Airlines superaron conjuntamente la barrera de los 100.000 millones de negocio por primera vez desde que hay registros y cerraron los nueve primeros meses del año con ganancias de 9.960 millones de euros.
Todas ellas se apoyaron en un mayor volumen de tráfico aéreo, que sumó de enero a septiembre 544 millones de pasajeros (un 8,5% frente a los 497 millones del mismo periodo de 2019) gracias a la recuperación del mercado doméstico e internacional, un fenómeno que se notó principalmente en las compañías enfocadas en el bajo coste. IAG, que engloba las operaciones de cinco aerolíneas (Iberia, Vueling, British Airways, Level y Aer Lingus), aprovechó una demanda sostenida en sus rutas en el Atlántico Norte y Sur, así como en todos los destinos de ocio en Europa. El grupo Air France, por su parte, operó al 94% de su capacidad respecto a 2019, si bien se situó por encima con Transavia (126%), la compañía aérea neerlandesa low cost que centra sus operaciones en destinos vacacionales de Europa, África y Oriente Medio.
Ryanair batió su propio récord y alcanzó los 157 millones pasajeros [ver gráfico] en los nueve primeros meses del año, un 35% más que en el periodo enero - septiembre de 2019. La compañía, que cuenta con un 24% de cuota de mercado en España y un porcentaje similar en otros países de Europa (38% en Italia y 36% en Polonia), fue la primera en volver a términos pre-Covid ya en 2022. Lufthansa, por su parte, fue la más rezagada entre las grandes aerolíneas europeas para recuperar el volumen de pasajeros pre-Covid-19. El grupo de aerolíneas que engloba a Austrian Airlines, Swiss, Brussels Airlines y Eurowings -próximamente también a ITA Airways- operó un 17% por encima del pasado año, si bien su capacidad frente a los niveles previos a la pandemia fue del 82%. Para 2024 espera que sea del 95%.
Las ganancias de las compañías analizadas se elevaron en conjunto a más de 9.900 millones de euros, destacando la aportación de IAG y Ryanair (solo en seis meses), que superaron el umbral de los 2.000 millones de beneficios. También destacó a título particular Wizz Air, que ganó 450 millones de euros frente al resultado del pasado año, cuando cosechó todavía pérdidas. La compañía espera ganancias al cierre de su año fiscal 2024, aunque ligeramente menores de las previstas. Mejor ha sido la previsión a futuro de EasyJet, que actualizó sus proyecciones a mediados de octubre y estimó unas ganancias récord de entre 650 y 670 millones de libras para el cierre de su año fiscal (octubre - septiembre).El otro gran indicador que provocó un récord generalizado en los beneficios de las aerolíneas fue el factor carga de sus aviones, que permitió rentabilizar más cada vuelo.
Todas las grandes aerolíneas analizadas llevaron sus aviones más llenos, si bien las que más lo consiguieron fueron nuevamente las low cost, con una ocupación media superior al 90% en el caso de EasyJet (90%), Ryanair (95%) y Wizz Air (92,5%). Las antiguas aerolíneas de bandera tuvieron cifras de ocupación inferiores, como fue el caso de IAG (85,9%), Lufthansa (83,4%) y Air France (87,5%), si bien todas mejoraron respecto al año anterior.
Billetes más caros
A unos aviones más llenos se sumaron unos asientos más caros. Todas las aerolíneas encarecieron sus billetes durante los nueve primeros meses del año en comparación con el mismo periodo de 2022. Aunque cada una mide este indicador con distintos parámetros, la información remitida a sus inversores muestra una mayor rentabilidad por billete. IAG, cuyos ingresos unitarios de pasaje se miden analizando los ingresos del billete entre los asientos por kilómetro ofertado (AKO, por sus siglas en inglés), registró un incremento del 9,68%, mientras que Air France lo hizo en un 11,41%. Lufthansa, que mide los ingresos totales por los asientos disponibles y kilómetros, creció en un 18%. No es casualidad que tras la presentación de estas cifras Bruselas haya anunciado una investigación para esclarecer qué factores están empujando al alza el precio de los billetes.
Las previsiones para el cierre de año y el próximo 2024 son positivas, a la vista de las nuevas inversiones planificadas para ampliar o renovar la flota. Las compañías analizadas han anunciado durante este año pedidos para más de 1.000 aeronaves, destacando por encima del resto la solicitud de 600 nuevos aviones de Turkish Airlines a Airbus, todavía por acordar en firme, lo que supondría un pedido histórico que superaría al que las aerolíneas indias de rápido crecimiento han llevado a cabo también este año. Otro pedido de envergadura es el de Ryanair y sus 300 Boeing 737 Max para 2027 y 2033 y, a menor escala, los 157 que Easy Jet anunció para Airbus el pasado octubre al actualizar al alza sus previsiones financieras. Lufthansa e IAG diversifican su flota entre el fabricante europeo y el estadounidense y han acordado también pedidos este 2023 para los próximos años, si bien el holding hispano - británico seguiría negociando actualmente.
Los aeropuertos aprovechan el 'boom' de tráfico
Los buenos datos de las aerolíneas europeas se trasladaron a los aeropuertos, principalmente a los grandes hubs de conectividad. De acuerdo a las cifras de la patronal europea ACI, el conjunto de aeropuertos europeos creció hasta septiembre un 12,1% en comparación con los niveles anteriores a la pandemia (tercer trimestre de 2019), el tráfico de pasajeros en el tercer trimestre se situó en -3,1%, lo que marca una mejora significativa con respecto a la primera mitad del año (-7,7%) y significa un progreso continuo. Por nombres propios, destacó el resultado de los aeropuertos españoles gestionados por Aena, que apuntan a que este 2023 batirán su récord de tráfico.
Otros grupos aeroportuarios como MAG, que gestiona el aeropuerto de Manchester, London Stansted y East Midlands, también mejoraron, al recuperar el 97% de los pasajeros, al igual que Vinci Airports, que siguió creciendo en sus aeropuertos europeos de Francia, Portugal y Reino Unido. Heathrow, la infraestructura aérea más grande de Londres, creció un 34,4% y superó los 59 millones de pasajeros, mientras que Schiphol (Ámsterdam) logró que 5,8 millones volaran hacia o desde el aeropuerto solo en septiembre (+11%).