
Las olas de calor que han marcado el verano no han venido acompañadas de nubarrones que presagien una posible recesión. De hecho, el sector hotelero está a punto de cerrar una temporada estival que si no va a ser récord se va a quedar muy cerca en lo que ha ocupación se refiere. De media, ha superado el 93% llegando a rozar el 100% en algunos destinos, según los datos de eBooking.com. "Se han cumplido nuestras previsiones de inicios de verano, tanto en número de visitantes como de gasto. En España se ha rozado la plena ocupación en julio y en agosto", destaca Toni Raurich, director de eBooking.com.
Unas cifras que van en línea con las que han registrado las cadenas hoteleras. Meliá Hotels International enfrentó el verano desde la prudencia pero con las reservas diarias en libros un 30% superiores a las registradas en los hoteles vacacionales en 2019 y un 10% superiores a las de 2022. Y el verano ha sido mejor de lo esperado. "Podemos decir que el resultado ha sido positivo, con una demanda que nos ha permitido mejorar semanalmente nuestras proyecciones, y nuestras expectativas iniciales", asegura el grupo de la familia Escarrer.
Meliá destaca que ciertas regiones como Baleares y los principales destinos de la costa ya registran niveles de ocupación similares a los de 2019. "Las zonas de Benidorm y Torremolinos han destacado por su alta demanda, alcanzado unas ocupaciones de casi lleno en todos los meses", detalla el grupo balear.
Quien también está registrando un verano muy positivo es NH. Tanto en julio como en agosto registran un crecimiento del 19% en comparación con el año anterior con un especial buen comportamiento en zonas de la cornisa cantábrica, Coruña, San Sebastián o Andalucía.
El grupo propiedad de Minor destaca el impulso que ha vivido este verano gracias a la celebración de eventos internacionales como el Orgullo Gay y el MadCool en Madrid o el paso del Tour de Francia por San Sebastián.
Unas cifras en línea con las registradas por Riu. "La parte central de la temporada alta, los meses de julio y agosto, ha sido muy buena. Hemos visto una demanda muy fuerte para todos nuestros hoteles de España que ha derivado en una ocupación media el 95% y en un aumento de tarifa media de alrededor del 10%", explica Maru Araña, directora de Contratación y Ventas para España y Zona Atlántica.
Desde Sercotel hacen un balance "positivo" de los meses de julio y agosto. "Hemos logrado cumplir las previsiones que nos habíamos fijado al inicio del periodo, y hemos alcanzado una ocupación media que se ha situado en torno al 80% a nivel nacional", destaca la compañía.
El grupo español destaca el buen comportamiento que ha registrado la capital catalana, donde en los cuatro hoteles que tienen en cartera han llegado a alcanzar una ocupación próxima al 95%. "La ciudad de Barcelona ha sido el destino nacional que ha registrado una ocupación media más elevada", explican.
Un optimismo que compartes desde SiteMinder. "A finales de junio, los primeros análisis de SiteMinder de las reservas hoteleras en España ya indicaban que nuestro país se enfrentaba, posiblemente, al mejor verano registrado. A principios de septiembre, hemos visto las reservas hoteleras para el mes en España tienen su mejor arranque en cinco años - de hecho, a día de hoy, las reservas en España se mantienen muy por encima de los niveles de 2019", celebra Sara Padrosa, directora para España de SiteMinder.
Optimistas de cara a fin de año
El verano ha dejado un buen sabor de boca entre las cadenas hoteleras que, aunque prefieren seguir siendo prudentes con respecto a la evolución de los próximos meses, ya auguran que salvo incidentes de última hora puede ser un año de récord.
El 65% de los hoteleros españoles espera que 2023 sea el año que registren los mayores ingresos y beneficios hasta la fecha, según datos de Statista recogidos en II Barómetro del Alojamiento en España elaborado por Booking.
Meliá, por su parte, mantiene las previsiones para los próximos meses que transmitió durante la presentación de resultados correspondientes al primer semestre y esperan alcanzar los 1.800 millones de euros de facturación así como con unos niveles de rentabilidad similares a los de 2019.
Riu tiene datos sobre la mesa para ser optimista y el grupo asegura que las previsiones "son buenas", tanto que ya cuentan con reservas que representan el 85% de ocupación hasta octubre y prevén que la cifra pueda aumentar hasta el 92%. "En cuanto al invierno 23/24, esperamos que esté en la línea del año anterior, que ya fue muy bueno", apunta la directora de ventas y contratación.
La agencia de viajes online Destina confirma las buenas perspectivas para los próximos meses. "Los datos para los próximos meses siguen siendo buenos. En septiembre ya vemos un incremento del 36% en número de reservas y para octubre es de un 84% frente a lo que llevábamos a estas alturas del año pasado, por lo que ahora no se aprecian signos de recesión ni bajada de ventas", explica Ricardo Fernández, director general de Destinia.
Pese a que en España no se observan signos de recesión, no ocurre lo mismo con otros países europeos y esto sí podría suponer un riesgo para el turismo español. "Hay que ser cautos porque en los próximos meses dependemos mucho del turismo internacional, principalmente el inglés y el alemán, y en algunos de estos mercados ya se empieza a notar una ralentización en el consumo en las rentas medias-bajas, lo que puede afectar a las reservas de los últimos meses del año", añade Fernández.
Subida de precios
El sector ha registrado importantes datos de ocupación incluso teniendo que hacer frente a importantes subidas de precios para intentar paliar los efectos del encarecimiento de los costes. "A nivel de precios, observamos un aumento en comparación con 2022, con un incremento del 11% en la gran mayoría de casos, siguiendo la tendencia al alza que viene registrando todo el sector en lo que llevamos de año", explican desde Sercotel.
Pese que la demanda no se ha visto mermada por el alza de precios, si se observa un cierto cambio de tendencia con respecto a años anteriores. "Debido a esta subida de precios que se ha ido viendo en los últimos años, no se ha dejado de viajar pero en verano sí que se ha reducido ligeramente la estancia media un 6%, quedándose en una media de 4 días durante todo el verano", apunta el director general de Destinia.
Llama la atención, sin embargo, que esta tendencia se corrige en el mes de septiembre —que tradicionalmente es más barato que julio y agosto—. "La estancia media es superior a cualquier otro mes del verano: 4,6 noches, esto tiene que ver con que el precio se ha mantenido igual que en 2022 este mes y es más bajo que el de verano (56 euros en julio, 60 en agosto y 55 en septiembre) por lo que ayuda a que por el mismo importe se pueda alargar un poco la estancia media", matiza Fernández.