
La guerra del satélite está servida. En un lado del espacio se encuentran los 'Starlink' de Elon Musk y justo enfrente irrumpen los Kuiper del Amazon de Jeff Bezos. El lanzamiento de estos últimos se produjo ayer, en la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral.El consejero delegado de Amazon, Andy Jassy, publicó ayer en X, en la antigua Twitter, que el lanzamiento había sido un éxito y que todo "está funcionando como se esperaba en la órbita baja de la Tierra". Para llevarlo a cabo, un cohete Atlas V de United Launch Alliance (ULA) despegó desde las instalaciones de Florida (EEUU) cargado con los primeros 27 satélites de un total de 3.236 previstos.
El presupuesto inicial alcanza los 8.700 millones de presupuesto, suficiente para llevar internet a cualquier rincón del planeta. Su conectividad proporcionará servicios a millones de clientes, incluidas escuelas, hospitales, empresas, agencias gubernamentales y otros que operan en lugares sin conectividad confiable.
Fuentes de Amazon explican que los satélites del Proyecto Kuiper orbitarán entre 590 y 630 kilómetros de la tierra, desde donde ofrecerán tres tipos de servicio: "Nuestro modelo ultracompacto proporciona velocidades de hasta 100 megabits por segundo (Mbps); el modelo estándar ofrece hasta 400 Mbps y el modelo más grande, que está diseñado para aplicaciones empresariales, gubernamentales y de telecomunicaciones, ofrece hasta 1 gigabit por segundo (Gbps)", apunta el grupo estadounidense.
Durante los próximos años, los equipos de Kuiper y ULA realizarán siete lanzamientos más de Atlas V y 38 lanzamientos en el cohete Vulcan Centaur de ULA, que es más grande. Se planean más de 30 lanzamientos adicionales con otros proveedores de lanzamiento: Arianespace, Blue Origin y SpaceX.
Rajeev Badyal, vicepresidente del proyecto Kuiper, tiene claro que se trata de un gran paso para la compañía, donde el ámbito de mejora es colosal. "Hay cosas que sólo se aprenden en vuelo", declaró el directivo, sin restar un ápice a las pruebas realizadas en tierra. «Independientemente de cómo se desarrolle la misión, éste es sólo el comienzo de nuestro viaje», afirmó en un comunicado la compañía.
Gary Wentz, vicepresidente de Programas Gubernamentales y Comerciales de ULA, describió el lanzamiento en un comunicado de prensa como "un hito increíble en la ambiciosa iniciativa de Amazon para proporcionar un servicio de banda ancha rápido y fiable a las comunidades desatendidas y subatendidas de todo el mundo", con un alcance de 4.600 millones de personas. "Es la culminación de años de trabajo de nuestro equipo y socios, y sienta las bases para nuestra siguiente fase: desplegar y escalar nuestra constelación de satélites y nuestro servicio".
El gigante tecnológico Amazon se ha comprometido a invertir más de 10.000 millones de dólares (8.700 millones de euros) en el proyecto, con la ambición de comenzar las pruebas piloto con clientes en 2026 y ampliar la cobertura en los años siguientes.
Lanzamiento en tres fases
Fuentes de la referida ULA, proveedor de servicios de lanzamiento de naves espaciales para el gobierno de los Estados Unidos, ha descrito en su página web los detalles del cohete lanzadera.
A grandes rasgos, el vehículo consta de tres grandes Bloques: En la parte más elevada de la nave se encuentra el denominado Carenado de carga útil (PLF), habitáculo que encapsula la carga útil, en una superficie de 5,4 m de diámetro. "El PLF es una estructura mixta de material compuesto, con un núcleo ventilado de aluminio y panal de abeja y láminas frontales de grafito-epoxi. La altura del vehículo con el PLF medio de 5 metros es de 62,5 metros.
En la segunda etapa del lanzamiento entra en juego la parte de Centaur, compañía que "ha lanzado con éxito naves espaciales a todos los planetas del sistema solar, ha enviado docenas de satélites científicos y meteorológicos, ha transportado activos críticos al espacio para la seguridad nacional de EE.UU. y ha hecho posible misiones comerciales, incluido el apoyo al Programa de Tripulación Comercial de la NASA", según ULA. En este caso, se trata de un propulsor de 3 metros de diámetro y 12,6 m de longitud. "Sus tanques de propulsante están estabilizados a presión y construidos en acero inoxidable resistente a la corrosión", explican. Este depósito es un vehículo resistente a altísimas temperaturas, alimentado con hidrógeno líquido y oxígeno líquido, propulsado por un motor RL10A-4-2 que produce 100,5 kilo-Newtons de empuje. "Esos tanques criogénicos están aislados con una combinación de mantas purgadas con helio, escudos contra la radiación y espuma aislante pulverizada (SOFI)". El adaptador delantero Centaur (CFA) proporciona soportes estructurales para el sistema de aviónica tolerante a fallos e interfaces estructurales y eléctricas con la nave espacial.
Por último, el Booster del cohete tiene 3,8 m de diámetro y 32,5 m de longitud. "Los tanques del propulsor son rígidos y están construidos con barriles de aluminio isogrid, cúpulas de aluminio hilado y faldones entre los tanques". El mismo fabricante señala que "la propulsión del cohete la proporciona el sistema de motores RD-180 (un solo motor con dos cámaras de empuje). El RD-180 quema RP-1 (propulsante de cohete-1 o queroseno altamente purificado) y oxígeno líquido y lanza 3,83 megavatios (con más de 400.000 litros de carburante propulsor).