Telecomunicaciones

Orange y MásMóvil arriesgan su fusión por un conflicto abierto en la CNMC

  • La integración en trámite limita la capacidad de elección a un solo operador mayorista de IoT
  • Bruselas vigilará las posibles trabas a la competencia denunciadas en el mercado de objetos conectados
  • Las dos compañías deberán resolver sus litigios con terceros para así reducir las incertidumbres
Ludovic Pech, consejero delegado de Orange España y Meinrad Spenger, consejero delegado del Grupo MásMóvil

Orange España y MásMóvil afrontan estos días la recta final para culminar su fusión, pero lo hacen con un riesgo latente: ambos operadores mantienen un conflicto abierto en la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Pese a que el organismo español carece de competencias para dilucidar la integración en ciernes -ésta corresponde a Bruselas-, la situación interna "podría representar cierto obstáculo para el proyecto de consolidación en el sector", según explican fuentes del sector.

Para evitar posibles disgustos en Bruselas, el tiempo apremia a Orange y MásMóvil si pretenden despejar posibles problemas regulatorios, ya que los dos operadores deberán afrontar su examen final el próximo 4 de septiembre. Ese día, la Comisión Europea está emplazada para anunciar el dictamen sobre la referida integración. De esa forma, los plazos de actuación de Orange España y MásMóvil para limar las asperezas en asuntos de competencia se reducen a las tres semanas que restan de julio, una vez que agosto se considera espacio de vacaciones en el seno comunitario.

El motivo de controversia reside en las presuntas irregularidades denunciadas ante la CNMC sobre el negocio español de máquina a máquina (M2M), también conocido como Internet de las Cosas (IoT). La sala de supervisión regulatoria del organismo que preside Cani Fernández inició el procedimiento de conflicto el 9 de diciembre del año pasado, para imponer medidas provisionales a MásMóvil en favor del operador Alai Operador de Telecomunicaciones. Esta pequeña empresa de telecomunicaciones reclamó a MásMóvil el mantenimiento del acceso mayorista a la red Movistar que hasta entonces disfrutaba a través del acuerdo previo establecido con el grupo amarillo.

Tras analizar la denuncia, la CNMC entendió inicialmente que la compañía que lidera Meinrad Spenger incumplía las obligaciones contractuales con el operador de IoT. Sin embargo, hace apenas diez días, la CNMC volvió por sus pasos al publicar el informe de audiencia, que puede interpretarse como favorable a MásMóvil. En ese informe, el regulador conmina a MásMóvil a realizar una oferta comercial a Alai, pero sin efectuar el corte del servicio de Movistar, además de proporcionar el servicio de 5G. Tras el cierre del referido trámite de audiencia, el conflicto sigue abierto una vez que Alai ha presentado alegaciones y, por tanto, aún falta la decisión final por parte del Consejo de la CNMC, que podría realizarse a finales de este mes o en septiembre.

Al seguir el litigio pendiente de resolución, este segmento del mercado mayorista podría ser motivo de atención por parte de los supervisores comunitarios una vez que la fusión de Orange y MásMóvil reduce la capacidad de elección en el negocio del Internet de las Cosas. De hecho, solo Orange y MásMóvil ofrecen ofertas mayoristas de IoT al resto del mercado, una vez que Movistar y Vodafone han renunciado a ofrecerlas, sin que exista obligación regulatoria para que estas empresas cambien de decisión. Es decir, los dos únicos operadores que actualmente abren sus redes al mercado mayorista de IoT -Orange y Másmóvil- están llamados a consolidarse en un único jugador, con el riesgo que eso representa para la capacidad de elección en ese nicho de mercado.

"Está muy mal visto que Bruselas autorice una operación sin remedios cuando existen litigios abiertos de competencia", indican a elEconomista.es otras fuentes del sector consultadas. Para evitar cualquier tipo de interferencia con el proceso de autorización en curso en Bruselas, MásMóvil podría dirimir este conflicto por la vía de un acuerdo con el litigante .

Según se desprende de la resolución pública de la CNMC, Alai tiene firmado un contrato de operador virtual (OMV) con Xfera (Grupo MásMóvil) para recibir un servicio mayorista de comunicaciones electrónicas móviles, de manera que Alai puede "comercializar ofertas minoristas de IoT bajo la citada condición de OMV completo". Además, dicho contrato fija que la prestación de servicios a Alai se lleve a cabo sobre la base de la red móvil en España de la propia MásMóvil, pero también sobre las redes de Movistar y de Orange, con quienes Xfera tiene firmados los correspondientes acuerdos de itinerancia nacional. Para mayor complejidad, el operador de IoT manifestó a la CNMC que MásMóvil "le había trasladado informal y telefónicamente que el cese del acceso sobre la red de Movistar tendría lugar en algún momento dentro del año 2023" .  A su vez, Alai recalcó al regulador que la citada interrupción prevista por MásMóvil "tendrá unas consecuencias irreparables" para su empresa, que verá comprometida su capacidad para competir en el mercado minorista de IoT, generando efectos negativos para sus clientes". El posterior trámite de audiencia inclina la balanza a favor de MásMóvil, pero persiste la incertidumbre ante las posteriores alegaciones de Alai y la ausencia de resolución. 

A su vez, fuentes del sector consideran que el conflicto abierto en el mercado mayorista de IoT podría impactar al consumidor debido a la ausencia de ofertas ajenas a las de Orange y MásMóvil, ahora llamadas a fusionarse. También señalan la necesidad de que se garantice el acceso a múltiples redes, origen del referido conflicto.

En la actualidad, el negocio español de IoT se encuentra repartido casi a partes iguales entre Vodafone, Movistar y Orange con cuotas de 30-33%, mientras que la cuota de Alai ronda el 0,5%, sin que MásMóvil opere en este segmento.

El teléfono del ascensor

La normativa exige a todos los ascensores españoles la disponibilidad de un servicio de telecomunicaciones para su uso en caso de avería. Esa conexión se reduce a una tarjeta SIM de internet de las Cosas, con prestaciones muy básicas y de muy bajo coste. El operador Alai ofrece ese servicio actualmente sobre la red de Orange, MásMóvil y Movistar, aunque la cobertura de este último operador lo suministra MásMóvil gracias a sus acuerdos pretéritos de roaming con la filial de Telefónica. La fusión de Orange y MásMóvil, junto con la suspensión del acceso mayorista a Movistar por parte de MásMóvil, impide a Alai competir en ese mercado, así como en el de alarmas, telemedicina o localización. Asimismo, los problemas de cobertura en muchos ascensores desaparecería si los virtuales de IoT pudieran acceder a múltiples redes.

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