Los principales operadores de telecomunicaciones europeos han dado un paso de gigante para liderar la defensa de la privacidad online de los usuarios en el mercado de la publicidad digital. Mientras que Google trabaja a toda velocidad para acabar con las denominadas cookies de terceros, los líderes del mercado de las telecomunicaciones proponen un sistema alternativo capaz de respetar la privacidad y seguridad de la información personal que fluye por la web.
Se trata de Telefónica, Orange, Vodafone y Deutsche Telekom (DT), compañías que han solicitado autorización a la Comisión Europea para constituir una joint venture para estos fines. De hecho, la Comisión recibió el pasado 6 de enero la correspondiente notificación de un proyecto de concentración por los referidos operadores para crear una empresa conjunta, que se denominará TrustPid.
De esta forma, Stephane Richard (consejero delegado del Grupo Orange) como Nick Read (primer ejecutivo del Grupo Vodafone), dejarán encarrilada una de las operaciones más ambiciosas de sus respectivos grupos antes de ceder el mando a sus respectivas sucesoras, Christel Heydemann y Margherita Della Valle.
Según se desprende de la documentación elevada a Bruselas, las mayores compañías de telecomunicaciones de España, Francia, Reino Unido y Alemania han unido sus fuerzas para ofrecer "una solución de identificación digital basada en la privacidad" con el objetivo de "apoyar las actividades de marketing y publicidad digital de marcas y editores". Entre otros detalles, las grandes compañías de acceso a la web del continente solicitarán el consentimiento previo de los usuarios para generar un token seguro y seudónimo derivada de una identidad interna cifrada y vinculada a la suscripción a la red de un usuario". Dicha unidad de valor -proporcionada únicamente por los referidos operadores -y también propietarios de la mayor parte de las infraestructuras de telecomunicaciones del continente para "reconocer a un usuario sin revelar ningún dato personal directamente identificable".
Con este mecanismo, las telecos materializan parte de su manifiesto compromiso para que los usuarios preserven la soberanía de sus datos, "lo que les permitirá optimizar la difusión de publicidad, los sitios y aplicaciones". Además, los usuarios tendrán acceso a un portal de privacidad desde donde podrán revisar a qué marcas y editores han dado su consentimiento explícito, y retirarlo si fuera su deseo.
Apple ha llevado la delantera en el asunto al exigir a las aplicaciones que pidan permiso explícito a los usuarios para rastrearlos en otras aplicaciones y sitios web. Este movimiento representó un severo varapalo para Google y Meta. De hecho, estos dos grupos estadounidenses acaparan más de la mitad de los ingresos del mercado publicitario digital, aunque sus respectivas cuotas de mercado llevan menguando de forma considerable en los últimos años.
Guerra a las 'cookies'
La gestión respetuosa de las cookies permitiría eliminar el rastro informativo que deja cada usuario durante su navegación online (disponible en las referidas cookies), que actualmente sirve para agilizar la navegación por Internet al tiempo que desvela los asuntos de interés de los internautas. Google prevé lanzar sus correspondientes API de Privacy Sandbox a partir del próximo otoño, con el objetivo de que estas herramientas puedan estar operativas inicialmente en el navegador Chrome y sea capaz de eliminar las cookies de los anunciantes y editores desde mediados del próximo año.
Vodafone y Deutsche Telekom llevan trabajando desde el verano con sus respectivas redes en Alemania para probar TrustPid con editores, marcas y anunciantes. por lo pronto, el regulador ha fijado el 10 de febrero como fecha límite para decidir sobre el acuerdo entre los cuatro operadores.
Alza de precios
Los anunciados incrementos de tarifas de servicios de telecomunicaciones, previsto para los primeros días de 2023, comenzarán a hacerse efectivos desde esta semana. Por lo pronto, y según recopila la agencia Servimedia, Movistar prevé incrementar los precios a partir del próximo viernes, 13 de enero, y lo hará en una media de un 6,8%, según informó la compañía a sus clientes. La marca de Telefónica explicó hace dos meses que se ve obligada a este encarecimiento por el repunte de los costes en el sector y no por la inflación, por lo que no activa ninguna cláusula IPC de revisión para próximos ejercicios. Vodafone España también revisará al alza las facturas de sus clientes a partir a partir del próximo 22 de enero. La compañía anunció a finales del año pasado que desde 2023 actualizaría sus paquetes conforme al IPC interanual promediado. Para este año ha calculado que subirá sus tarifas una media de cuatro euros.