María González Veracruz tiene claro que España será una potencia digital, capaz de liderar el despliegue de banda ancha en Europa, no solo de fibra óptica sino también de 5G. También confía en convertir el país en referencia continental para el diseño de microchips, así como en el mayor plató para rodajes de futuras series y producciones audiovisuales. En su primera entrevista para un periódico de difusión nacional en calidad de secretaria de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, esta bioquímica murciana de 43 años conoce al detalle los retos y oportunidades de un sector para el que ya contribuyó con la redacción de la actual Ley General de Telecomunicaciones.
Hemos asistido a la fulgurante subasta de 25 GHz, resuelta en un día. ¿Cómo valora la licitación?
Estamos contentos por la respuesta de los cuatro operadores. Todos han hecho una buena apuesta. La adjudicación de 2 GHz de la banda de 26 GHz (1.800 MHz en el ámbito estatal y 200 MHz en el autonómico) supone un gran paso para el despliegue del 5G. La resolución de esta subasta nos va a aportar certidumbre para el despliegue de las inversiones 5G. Hemos facilitado esta subasta para llevarla a cabo este año, como nos comprometimos con Bruselas, y por eso hemos favorecido el proceso con la bajada de precios o con la fijación de plazos de uso de las frecuencias en 20 años, prorrogables en otros tantos. Creo que es de interés general el facilitar que los operadores puedan seguir invirtiendo en infraestructuras, siempre desde nuestra perspectiva público-privada. Así, hemos rebajado el precio de las frecuencias porque queremos que los operadores aceleren el despliegue de 5G en toda España.
¿Considera que las condiciones de la subasta de 26 GHz se han adaptado a las necesidades reales de los operadores?
Somos conscientes del esfuerzo que están haciendo los operadores y hemos facilitado una banda que, en determinados aspectos, no necesitaban de forma inmediata. La bajada de precios de la subasta ha sido importante, con cuatro millones por cada uno de los bloques. Creemos que fue un precio razonable.
¿Existió afán recaudador en la licitación?
No ha habido afán recaudador, sino que pretendemos animar la inversión. España tiene una oportunidad con el 5G, compartida por los operadores, pero tenemos que visualizarlo desde lo público y lo privado. Insisto, el objetivo no ha sido recaudatorio sino de despliegue.
¿Qué balance realiza de su primer trimestre en la Secretaría de Estados de Telecomunicaciones?
Vivimos un momento único y el reto es apasionante. Nos encontramos ante la oportunidad de liderar unos cambios históricos para la modernización, digitalización y sostenibilidad del país. Debemos valorar lo conseguido en conectividad, impulso al Perte chip y también en el 5G, ya con casi todo el espectro prioritario concedido. Estoy segura de que 2023 será el año del 5G. Podemos esperar un ritmo de despliegue muy potente.

¿Qué desafíos tiene por delante desde la secretaría de estado?
Desde que llegué al cargo me he volcado en la Agenda España Digital 2026 para conseguir una conectividad capaz de llegar realmente a todos los rincones de España, con la banda ancha ultrarrápida disponible en cualquier zona del país y así generar igualdad de oportunidades y reforzar la cohesión territorial. Estas prioridades no sólo impactan en las personas, sino también en la administración, en el sistema público de salud, en la educación y en la economía digital, entre otros.
"La banda ancha de 100 Mbps podría llegar a toda la población española antes de 2025"
El calendario de cobertura de banda ancha parece encarrilado…
Con la ejecución de los programas UNICO BA activos, la banda ancha ultrarrápida llegará al 95% de la población en 2023 y el objetivo es alcanzar el 100% en 2025, en línea con la Unión Europea. Actualmente estamos en un porcentaje del 88,3%, según los últimos datos consolidados a junio de 2021. Estamos convencidos de que el objetivo se va a cumplir, estamos absolutamente volcados en ello.
¿Resultaría viable adelantar plazos de cobertura?
Estamos trabajando a la máxima velocidad y no descarto que podamos llegar al 100% de la población con conexiones de, al menos, 100 Mbps en sentido descendente antes de 2025 y así cerrar la brecha digital en las zonas rurales.
¿Cuándo se resolverá el programa 'UNICO Demanda Rural'?
Será en enero. Es una iniciativa muy importante que nos ayudará a llevar la conectividad a 100 Mbps descendentes a determinadas zonas donde antes no era posible. Se trata de un programa financiado con los Fondos Next Generation, cuya resolución definitiva está a punto de salir. Ahora veremos las tecnologías que optan y cómo se concreta todo.
¿Qué oportunidades ofrece el 5G?
Estamos convencidos de que España puede liderar el despliegue del 5G en Europa y ponemos todas las políticas públicas para conseguirlo. Existe una oportunidad y debemos liderarla. Por ejemplo, con la licitación de la banda 26 GHz, somos uno de los países europeos que ya tiene en marcha casi todo el espectro prioritario. Con la licitación de la banda y la resolución de la subasta hemos dado un gran paso.
¿Qué han aprendido de otras licitaciones?
Hay un concepto fundamental que hemos aprendido con el despliegue de la fibra: queremos evitar las brechas digitales desde su inicio. Por ese motivo estamos promoviendo el despliegue de 5G en las zonas rurales desde el primer momento.
¿Y cómo pretenden evitar la brecha digital en el 5G?
Por un lado, estamos liberando el espectro y por otro hemos lanzado el programa UNICO 5G Redes-Backhaul Fibra Óptica, para dotar de conexiones de fibra óptica a las torres de telefonía móvil backhaul (red troncal). En su primera convocatoria se dirige a municipios de menos de 5.000 habitantes para así garantizar la llegada de la mejor conectividad a todos los puntos de España, más o menos al mismo tiempo, mientras fomentamos los despliegues privados. Tras el análisis de lo vivido en el pasado, queremos adelantarnos desde el principio a esas zonas a las que no van a llegar los operadores porque no les resulta rentable. Y así ha salido backhaul, que ha tenido una gran demanda, pese a que se encuentra en proceso de resolución. Ya somos líderes en fibra óptica en Europa y en 5G haremos lo que haga falta para conseguirlo. Es más, creemos que Europa tiene que liderar el 5G global y estamos en disposición de hacerlo desde España.
¿Realmente podemos ser una voz autorizada en Europa en materia de microchips y semiconductores?
Estamos en disposición de tener autonomía en este sector. Soy prudente, pero en el marco del diseño de microchips estamos bien posicionados para ese posible liderazgo europeo. En muy poco tiempo hemos convertido lo que era una necesidad en un proyecto estratégico. Hemos visto que España tiene un gran ecosistema, con referencias en el ámbito del diseño en Valencia, Cataluña, Málaga o Galicia entre otros. Ya hemos tenido una reunión de los stakeholders con la vicepresidenta primera del Gobierno, con 90 entidades, entre universidades, centros públicos, empresas. No sé si es pronto para decir si podemos liderar o no la UE en semiconductores, pero sí puedo asegurar que estamos en la línea de generar las capacidades de país para tener autonomía en determinados sectores. Todo lo que estamos haciendo es revolucionario para el sector. La propia intención del Perte ya ha generado expectativas. Esto nos lo transmiten desde las universidades, donde hay líneas de investigación que se han recuperado y ya se han atraído grandes inversiones. Todo eso ha sucedido en solo seis meses y es ahora cuando tenemos los presupuestos para ejecutarlo.
¿Espera nuevas inversiones de grandes tecnológicas en el país?
La decisión de Intel ha sido muy importante como la de Cisco. El Gobierno se ha volcado para demostrar que el ecosistema español es potente y que tenemos mucho talento en el país. Esa es la pieza fundamental para atraer este tipo de inversiones. El Perte chip va a ser una revolución en el sector y podemos esperar muy buenas noticias.
"Las leyes de telecomunicaciones deben ser leyes de país para generar seguridad jurídica"
¿Deberían invertir las gigantes 'online' en el mantenimiento de las redes sobre las que ofrecen sus servicios y contenidos?
Creemos que hay que abordar el debate y que suceda en el marco europeo. Está todo abierto. Estamos en conversaciones con todos los agentes implicados, pero lo más importante es que también conversan entre ellos. Se debe escuchar a todas las partes y encontrar un modelo equilibrado y justo. Ahora habrá una consulta pública que nos permitirá hacer un análisis pormenorizado y tomar decisiones en el marco europeo.
¿Le parece justa la situación?
Abrimos el debate porque nos parece que la situación no es justa. Lo que necesitamos es mantener y, en lo posible, aumentar la inversión en infraestructuras. Consideramos que el debate debe realizarse de forma seria, rigurosa y contando con todo el mundo. En lo relacionado con el hub audiovisual estamos tomando medidas de distinto calado para promover la inversión extranjera en el país y convertir a España en el plató de Europa. Tenemos potencial para ello.
¿Dónde se sitúa el interés general en el pulso entre operadores de telecomunicaciones y plataformas?
Desde la posición pública, lo importante es atender al interés general y, en este caso, reside en que los operadores se encuentren en disposición de seguir invirtiendo en el país y así liderar en 5G como lo hacemos en banda ancha. Pero siempre con el ojo puesto en la ciudadanía, que está en el centro de todas nuestras decisiones. Queremos que los usuarios disfruten de las mejores redes, de forma asequible, como son los 35 euros de la tarifa del programa de Demanda Rural. En resumen, trabajamos para garantizar las infraestructuras porque es la puerta a todo lo demás.
¿De qué forma incentiva el Gobierno la inversión de los operadores?
Somos conscientes de la situación económica que viven los operadores y de la necesidad de fomentar el despliegue de 5G. Bajo esa premisa hemos asumido la bajada de precio de salida de los lotes de la subasta de 26 GHz, así como los plazos de vigencia y prórrogas de las mismas.
¿Cómo se imagina la digitalización, el 5G y la banda ancha en España en el plazo de tres años?
Me imagino una España digital. Lideramos la conectividad y vamos a garantizar que llegue a todos los rincones del territorio. En tres años podemos ser una referencia en 5G en la Unión Europea. Creo que los avances de España del sector de la microelectrónica van a suponer también un salto desde el punto de vista industrial y económico. El país atraerá inversión para la digitalización, la educación, la sanidad, la administración electrónica... Y el esfuerzo inversor en infraestructuras será básico para poder garantizar esa España digital y humanista, siempre con la tecnología al servicio de las personas. Vamos a muy buen ritmo, lo mejor está por venir y la transformación digital es una realidad imparable.
¿Debería existir un pacto de Estado en materia de telecomunicaciones, dada su importancia estratégica a largo plazo?
Las leyes de telecomunicaciones deben ser leyes de país, acordadas por los grandes partidos, con un marco estable que genere garantía y seguridad jurídica al sector y que no vaya dando bandazos.
Todo apunta a que, en 2030, la BBC británica no necesitará el espectro radioeléctrico ya que emitirá sobre las redes de ultra velocidad. ¿Podría suceder algo parecido en España?
Eso será materia de negociación en el marco de la Conferencia Mundial de Radiotelecomunicaciones y allí se decidirá el destino del espectro para los próximos años, en función de las necesidades futuras. Ahora mismo cada país expresa lo que quiere, sin necesidad de acuerdos. Aún es pronto para saber si se producirá el apagón de TDT o no, o cómo se reestructurará el espectro para ir liberándolo para las nuevas necesidades. No está claro, estamos en pleno debate y hay que ser prudentes.
El sector de las telecomunicaciones se siente históricamente castigado por el tratamiento fiscal que recibe. ¿Se puede esperar algún cambio en esa dirección?
En el radar no tengo novedades al respecto. El sector es consciente de que este Gobierno es muy sensible a sus necesidades y más en un momento como el actual. Creo que recibieron muy bien el marco de la Ley de Telecomunicaciones, que ha generado una estabilidad muy importante para sus propias inversiones. También están muy alineados con el apoyo que directamente estamos realizando. Hablamos de 500 millones de euros en ayudas en las dos convocatorias de Banda Ancha Único y 450 millones en el programa de Backhaul Fibra. Los operadores no son ajenos a que toda esa inversión es un espaldarazo para el sector.
¿Aplaude la fusión Orange España y el Grupo MásMóvil?
Esperamos que sea una buena operación. El proceso se encuentra en el tejado de la Comisión Europea. Al fin y al cabo, la fusión beneficia al sector español y europeo. Tenemos 400 operadores en Europa, frente a cuatro chinos y otros cuatro de los EEUU. Pensamos que si se fortalece el sector europeo, también ganan las infraestructuras y la ciudadanía. Pero aún es pronto para saber qué va a pedir la Comisión Europea.

Su departamento acaba de conceder ayudas para desarrollos en la Web 3. ¿Podemos esperar el estreno de las administraciones públicas en el Metaverso?
A todo se llegará. Creo que es demasiado pronto. Por ahora me conformo con que pueda funcionar como está previsto todo lo relacionado con la administración electrónica. Por ejemplo, que los trámites entre los ayuntamientos o comunidades sean interoperables.