
Qualcomm ha anunciado este viernes que Apple ha dejado de pagar las licencias relacionadas con el iPhone hasta que concluya el juicio que es consecuencia de la demanda presentada por la compañía de Cupertino el pasado mes de enero.
El anuncio intensifica la pelea entre la compañía de tecnología más grande del mundo que cotiza en bolsa y uno de los principales proveedores de componentes de su producto estrella, el iPhone. Su pelea implica miles de millones de dólares en ingresos por licencias de tecnología que, si son permanentemente cortadas o reducidas, podrían dañar la principal fuente de ganancias de Qualcomm e impulsar los márgenes de Apple.
La empresa dirigida por Tim Cook ha pagado al fabricante de chips por sus licencias desde que lanzó su iPhone en 2007, aunque no tiene una licencia directa con Qualcomm.
"Hemos estado tratando de llegar a un acuerdo de licencia con Qualcomm durante más de cinco años, pero se han negado a negociar términos justos", dijo Apple en un comunicado. "Sin una tasa acordada para determinar cuánto se debe, hemos suspendido los pagos hasta que la cantidad correcta pueda ser determinada por el tribunal. Como hemos dicho antes, las demandas de Qualcomm no son razonables y han estado cobrando tarifas más altas basadas en nuestra innovación, no en la suya".
Como consecuencia del anuncio, las acciones de Qualcomm cayeron con fuerza a primera hora, superando un descenso del 4% y marcando el precio intradía más bajo desde el pasado mes de junio, aunque hacia la media sesión se había moderado hasta una pérdida del 1%.
Para Qualcomm, la decisión de Apple es una nueva infracción de sus acuerdos legales con los proveedores de componentes del iPhone, que también fabrican dispositivos para otras compañías. Esos acuerdos son anteriores a la entrada de Apple al mercado de telefonía y todavía son legalmente aplicables, según Bloomberg.
"Aunque Apple ha reconocido que se adeuda el pago por el uso de la valiosa propiedad intelectual de Qualcomm, sigue interfiriendo con nuestros contratos", dijo Don Rosenberg, abogado general de Qualcomm. "Apple ha declarado inaceptables los términos del contrato unilateralmente; los mismos términos que han aplicado a los iPhones y iPads habilitadas para telefonía móvil durante una década".
Qualcomm es el principal proveedor para Apple y Samsung de semiconductores "módem" que ayudan a los teléfonos a conectarse a redes inalámbricas. Las dos compañías juntas representaron el 40% de los ingresos de Qualcomm por 23.500 millones de dólares registrados en el último año fiscal.