
Fotolog, la red social que arrasó en territorios hispanohablantes antes de que llegase Facebook, Twitter e Instagram, ha vuelto a la vida. Después de que principios de 2016 anunciase el fin de su actividad, la icónica red social ha vuelto, aunque con una particularidad: no dejará subir más de una foto al día.
Además de haber lanzado una versión escritorio, Fotolog ha llegado junto a una aplicación para Android y han prometido que la próxima semana llegará su versión para iOS.
Más allá de un rediseño, la plataforma llega con el ánimo de recuperar la esencia que la comunidad fotográfica tuvo a principios de los 2002, cuando se convirtió en la referencia social de millones de internautas. Por ello, a finales de abril migraron todos los usuarios, amigos, contenido y comentarios, con la idea de que se pudiera romper la particular cápsula de tiempo y retomar la cuenta de Fotolog justo donde se dejó.
Por ello, los usuarios podrán volver a entrar en sus perfiles con las mismas credenciales que usaban entonces y, si no se acuerdan, podrán solicitar al sistema que recuerde su contraseña.
La idea del nuevo Fotolog es "crear una red social diferente. Una buena, que no manipule nuestra mente, que abogue por una forma de usar las redes sociales sana y con significado. Que fomente conexiones reales entre nosotros, en vez de conexiones generadas por algoritmos", explican desde el manifiesto publicado en la página.
De momento la plataforma no llega con más aspiración que ser "un experimento" para "acabar con el exceso de publicaciones (...) el consumo banal de contenido (...) y el uso excesivo de las redes sociales", pero presumiendo de tener ahora mismo una comunidad de 2 millones de usuarios de 100 países distintos.