
Google sigue dispuesto a mejorar su infraestructura. Durante los últimos tres años, la compañía ha desembolsado 30.000 millones de dólares en estas operaciones construyendo desde centros de datos hasta cableados submarinos con la intención de mejorar sus servicios en la nube.
Un negocio donde compite cara a cara con Amazon Web Services (AWS) o Azure de Microsoft. Para seguir ganando cuota de mercado como rey de la publicidad online ha anunciado su intención de financiar tres nuevos cables submarinos que conectarán cinco regiones del mundo.

"Estas inversiones mejoran aún más nuestra red, la más grande del mundo, que en algunos casos ofrece el 25% del tráfico mundial de Internet. Empresas como PayPal aprovechan nuestra red e infraestructura para administrar sus negocios de manera efectiva", señala Ben Treynor Sloss, vicepresidente de la compañía en un comunicado.
De esta forma la división de Alphabet tiene previsto en el primer trimestre de este año estrenar nuevas regiones, donde se incluyen Países Bajos y Montreal para después dar vía libre a la de Los Ángeles, Finlandia y Hong Kong. El próximo año financiará tres proyectos de cableado submarino: Curie, un cable privado que conectará Chile y Los Ángeles; Havfrue, un consorcio que busca unir EEUU a Dinamarca e Irlanda; y el sistema de cableado Hong-Kong-Guam, otro consorcio que busca interconectar distintos centros de comunicación subterránea a lo largo de Asia.

"En PayPal, procesamos miles de millones de transacciones en todo el mundo y necesitamos hacerlo de forma segura, instantánea y económica. Como resultado, la seguridad, las redes y la infraestructura son factores clave a la hora elegir un proveedor en la nube", reconoce Sri Shivananda, vicepresidente y director de tecnología de PayPal. "Con Google Cloud, tenemos acceso a la red más grande del mundo, que nos ayuda a alcanzar nuestros objetivos de infraestructura y servir mejor a nuestros millones de usuarios", justifica.
Los cables submarinos se han convertido en la columna vertebral de internet al transportar más del 90% del tráfico de datos a nivel mundial. Según Google, las compañías que participan en poner en marcha estas obras de infraestructura incluyen a TE SubCom, una unidad de TE Connectivity Ltd, que cotiza en la Bolsa de Nueva York, y NEC Corp, que cotiza en la Bolsa de Tokio. Desde Mountain View, California, indican que Alphabet cuenta en estos momentos con una inversión directa en 11 sistemas de cableado submarino, donde se incluyen futuros proyectos y en construcción.
Sólo durante el segundo trimestre de 2017, Google triplicó el número de grandes contratos relacionados con sus servicios en la nube, según su consejero delegado, Sundar Pichai. Estos contratos, cuyo precio base superan los 500.000 dólares, todavía colocan a la compañía por detrás de Amazon y Microsoft.
Otras compañías como Microsoft, Facebook y Telefónica han participado en proyectos similares. Es el caso del cable submarino Marea que une España y EEUU. Con una extensión de 6.600 kilómetros, este proyecto conecta a través de fibra óptica Virginia Beach, en Virginia, con Sopelana, en el País Vasco. Marea tendrá capacidad para retransmitir de manera simultánea 71 millones de vídeos en alta definición por streaming (emisión en línea).