Los servicios de comida a domicilio Just Eat y Pronto, la mensajería Hermes y el minorista Metro Group han comenzado a probar en Londres un sistema para enviar sus pedidos sin necesidad de recurrir a un mensajero, o al menos uno humano. Y es que las compañías han comenzado a probar por las calles de la capital de Reino Unido un robot creado por Starship Technologies capaz de hacer frente a envíos.
De momento se trata de un proyecto piloto que llegará a otras tres ciudades europeas y que servirá a todas las compañías para saber la implicación real que tendría en la ciudad un servicio de entregas a domicilio realizado por "decenas de robots".
Aunque la idea en un futuro es que éstos robots sean completamente autónomos, durante el proyecto piloto éstos serán controlados de forma remota por humanos. El robot cuenta con seis ruedas que se pueden adaptar de diferentes formas para salvar escalones y cuenta con GPS, varias cámaras y sensores para poder operar de forma remota o autónoma.
Tienen una capacidad para unas dos bolsas de la compra y además están equipados con un sistema antirrobo, ya que cuenta con altavoces para alertar de que está siendo robado y las cámaras grabarían al asaltante, así como cuentan con un código PIN sin el cual no se puede abrir su particular maletero. Este código lo envía la compañía al destinatario a través de SMS, explica Quartz.
Una vez que el proyecto obtenga un resultado positivo y se lancen hacia la próxima fase, el objetivo final de Starship Technologies es rebajar el precio de las entregas en lo que se conoce como 'la última milla'. De este modo, la compañía creadora del robot asegura que bajará el precio de las entregas en la ciudad a 1 libra, frente a las 12 libras que se estima que cuesta ahora.