Los compradores de los coches eléctricos que fabrica la compañía estadounidense Tesla son bastante fieles y muestran un alto grado de satisfacción tras pagar precios que están al alcance de muy pocos. Ahora, algunos de ellos se están quejando de que el moderno Model X, que es capaz de conducirse a sí mismo de forma autónoma, tiene un fallo de diseño bastante grave: todas las luces se ven doble cuando es de noche.
Como informa CNet, las lunas del parabrisas delantero sufren algún tipo de fallo de fabricación que hace que los conductores se vuelvan un poco locos cuando cae el sol. El coche de delante aparece con seis luces de freno en lugar de tres, y el siguiente semáfoto tiene dos focos verdes en lugar de uno.
Así lo afirma un usuario en el foro Tesla Motors Club, que ha dejado claro que no tiene problemas de visión y que el fallo es del coche. De hecho, basta con mover la cabeza unos pocos centímetros a un lado u otro, para que las luces se solapen y dejen de estar duplicadas.
Aunque algunos usuarios se burlaron de él, otros usuarios han confirmado que sufren el mismo fallo, y que la propia fabricante les ha reconocido que conoce el problema.
Entre las soluciones posibles -por el momento Tesla no ha querido comentar el fallo- están la más clásica de cambiar la posición del cuerpo en el asiento o la más avanzada de ir a un taller y hacer que sustituyan la luna delantera por otra más convencional. Ambas alternativas no son excesivamente caras, pero no parecen de recibo en un vehículo cuyo precio supera el equivalente a 70.000 euros.
