Amadeo Llados, conocido también como Lladosfitness, es un influencer y 'coach motivacional' que ha ganado una enorme popularidad en los últimos años por su peculiar forma de ser, donde critica a los "panzas" y "los mileuristas" además de asegurar que él te puede dar las claves para ser rico.
Este influencer ha conseguido ganarse la atención de media España y gran parte de Sudamérica con sus mensajes y vídeos en redes sociales, lo que le llevó a crear una serie de cursos de pago (más de 1.000 euros para inscribirse) en el que supuestamente enseña a "ganar tu primer millón".
Muchas personas han tildado de secta esta base de seguidores que ha creado Llados, y es que sin analizamos punto por punto los patrones de comportamiento, lo cierto es que coinciden en la mayoría de casos, llegando muchos a límites como fardar en redes de que el poco dinero que tienen, se lo dan por completo a este gurú.
Por suerte, algunos miembros de la metodología Llados consiguieron abrir los ojos, y tras un golpe de realidad decidieron denunciar al influencer y coach, al sentirse engañados por él. En concreto este querella aludía a delitos de estafa y estafa piramidal, así como a diversos delitos de odio por los comentarios e insultos que este hacía tanto a sus alumnos como a otras personas en redes sociales.
El pasado mes de julio, el caso pasó a manos de la Audiencia Nacional, sin embargo, este pasado cinco de septiembre, el Juzgado Central de Instrucción N° 4 de Madrid ha desestimado la querella presentada debido a que la Audiencia Nacional carecía de la competencia objetiva para conocer estos hechos.
Los motivos por los que Llados se salva
En otras palabras, el juez determinó que los delitos imputados y la cuantía del perjuicio no cumplían los requisitos para que la Audiencia Nacional pudiera intervenir. Esto se debe a que por un lado los delitos de odio y asociación ilícita de los que se le acusan quedaban fuera de su ámbito, al igual que las acusaciones de estafa no cumple con los suficientes requisitos, como la gravedad o repercusión que podían tener sus actos.
Al mismo tiempo, no se demostró una afectación a la economía nacional, es decir, cuánto dinero le habían pagado los querellantes, y los pagos que sí se habían señalado eran inferiores al umbral de 7 millones de euros que suele utilizar el Tribunal Supremo para determinar la gravedad de la defraudación.
Por último, y aunque en un principio parecía que iba a ser una macroquerella, al final ha resultado en que el número de víctimas era insuficiente para justificar la competencia de la Audiencia Nacional.
Cabe destacar que aunque Llados no se tendrá que enfrentar a la Audiencia Nacional, cada víctima que denuncie podrá llevar el caso a los juzgados correspondientes a su lugar de residencia o al lugar donde se cometieron los hechos.