
Cada vez es más común ser víctima de un ciberataque, ya no hace falta que seas una persona importante o como mucho dinero, hoy en día todo el mundo es una víctima potencial, el problema es que los tipos de ataques se han diversificado tanto que es complido identificarlos. Por ese motivo, desde elEconomista.es te vamos a dar las principales calves para detectar un ataque de phishing.
El phishing es un conjunto de técnicas que buscan engañar a un usuario para obtener el acceso a sus cuentas y contraseñas en diferentes servicios online, el cibercriminal se hace pasar por una empresa o persona legítima con el fin de hacerse con los datos privados del usuario.
Si algo te suena raro, haz caso a tu instinto
Antes de ponernos a explicar los detalles en lo que te tienes que fijar para evitar caer en una estafa de phishing, lo primero y más importante es que si de primeras ya hay algo que te hace dudar de la legitimidad del correo, SMS o mensaje es mejor que no sigas hacia adelante y no des tu información personal.
Aunque tampoco está de más tener un antivirus en tu equipo, las mejores opciones son de pago, aunque aquí te dejamos tres opciones gratuitas que te pueden servir.
Los medios y las formas en las que pueden llegar estos ataques son muy variadas, pero entre las más comunes es que el atacante se haga pasar por un una empresa o servicio conocido. Por eso si recibimos un correo de una empresa que no tenemos ninguna cuenta con ellos, posiblemente se trate de una estafa.
En el caso de que sí que lo tengamos, pero lo que nos están pidiendo no es común y/o no hemos contactado con ellos por nada concreto, analiza la dirección de la cuenta de correo, busca faltas de ortografía y fíjate en el enlace y compáralo con otros de comunicaciones anteriores.
Más pistas
En el caso de que los detalles iniciales no te hayan aclarado del todo si se trata de una fuente fiable o no y te decides por seguir en el enlace que te han facilitado, analiza si la URL en la que te encuentras está en España al igual que es importante comprobar que la página web a la que te ha llevado es legítima y funciona correctamente.
En general los servicios legítimos no te piden información personal, porque ya la tienen recopilada cuando te registraste y si necesitan alguna información extra, te llevarán a su app o página web oficial para hacerlo, nunca desde fuera.
Es más fácil y probable caer en una estafa de phishing de lo que creemos, por eso siempre hay que estar alerta en Internet.