El fundador y consejero delegado de Tesla, Elon Musk, ha comprado de manera indirecta una participación del 9,2% de Twitter, lo que le convierte en el mayor accionista de la red social. En particular, se ha hecho con un paquete de 73,5 millones de acciones.
El movimiento era secreto hasta que Musk ha informado en un comunicado remitido a la Comisión de Bolsa y Valores de EEUU (SEC por sus siglas en inglés) y supone que el fundador de Tesla y SpaceX obtuvo el 9,2% de las acciones; el valor de ese porcentaje es de 2.888 millones de dólares (2.624 millones de euros) basándose en el precio de las acciones del pasado viernes. Lo hizo justo antes de realizar unas polémicas declaraciones sobre la red social.
La publicación revela que Musk compró las acciones el pasado 15 de marzo, pero hasta ahora no ha hecho ninguna mención pública sobre esto; algo llamativo, teniendo en cuenta que se ha convertido en el mayor accionista de la compañía, superando al fundador Jack Dorsey, que posee sólo el 2,25% de las acciones. Eso convierte a Musk en la persona con más poder hasta ahora para influir en los movimientos de una compañía que cambió de CEO a finales del año pasado, cuando Parag Agrawal recibió el control de las manos de Dorsey.
Más sorprendente que el hecho de no anunciar semejante inversión es que Musk criticó fuertemente a Twitter en los días siguientes a la compra. En una publicación que se hizo viral (como la mayoría de las publicaciones de Musk), el magnate presentó una encuesta a sus seguidores en las que afirmaba que "la libertad de expresión es esencial para una democracia funcional", preguntando si los usuarios creían que Twitter se adhería a este principio. Los resultados finales muestran que un 70,4% de los usuarios votaron que no.
Free speech is essential to a functioning democracy.
— Elon Musk (@elonmusk) March 25, 2022
Do you believe Twitter rigorously adheres to this principle?
En perspectiva, fue una publicación con mucho sentido, ya que Musk afirmó que "las consecuencias de esta encuesta serán importantes". Ahora podemos comprender que Musk estaba hablando del hecho de que se había convertido en el mayor accionista de Twitter y por lo tanto, puede influenciar el futuro de la compañía.
Musk es uno de los mayores críticos de Twitter, pese a ser también uno de los que más se ha beneficiado de la plataforma. Es bien sabido que Tesla no invierte en publicidad tradicional, prefiriendo que los propios usuarios compartan sus experiencias en redes sociales.
Musk también ha usado Twitter para promocionar sus productos y para compartir 'memes', no con poca polémica. Por ejemplo, la cuestión de la 'libertad de expresión' en Twitter llega en un momento en el que el expresidente estadounidense, Donald Trump, no ha conseguido el éxito que esperaba en su red social alternativa, Truth Social. Trump fue expulsado de Twitter después del asalto al Capitolio de los Estados Unidos por "incitar a la violencia".