
Una investigación revela que desde hace poco los auriculares con cable están ganando partidarios entre los más jóvenes, en redes sociales como TikTok.
Para quienes vivimos en su día los inconvenientes de los cables, nos puede parecer sorprendente, pero la verdad es que nunca murieron. Los audiófilos, por ejemplo, nunca han renegado del cable y lo han preferido a perder calidad con una conexión inalámbrica; aunque hay auriculares inalámbricos con códecs de alta calidad, como los Technics AZ60 que pudimos probar hace poco, eso no es suficiente para muchos.
Pero, según una investigación de Mashable, en realidad la calidad de sonido no tiene nada que ver con este resurgimiento de los auriculares con cable; y es más una cuestión de imagen y apariencias. En TikTok, la red favorita de los jóvenes, están sustituyendo progresivamente a los modelos más deseados, como los AirPods.
Las personalidades más populares de la red social tienen buena parte de culpa de esta tendencia. La actriz y modelo Lily Rose Depp ha sido una de las pioneras en recuperar los cables, con la intención de dar una imagen despreocupada y hasta cierto punto, descuidada. En realidad, cada pieza y complemento que lleva ha sido estudiado, pero al usar auriculares con cable, da la sensación de que ha cogido lo primero que vio, porque no tiene tiempo ni ganas de hacer nada más. Es un mensaje que cala en su audiencia, y los auriculares con cable son detalles que son captados inmediatamente e imitados.

No tienen que ser siquiera buenos auriculares; pero es evidente que muchos usan unos Earpods como los que Apple daba con los iPhone (y que aún tiene que incluir en Francia). En muchos casos, no cuestan más de 30 euros. Algunas cuentas ya consideran los auriculares con cable como "un accesorio vintage", y los vídeos que tratan estos dispositivos acumulan millones de vistas.
Esta repentina popularidad de los auriculares clásicos puede afectar a uno de los últimos lanzamientos de Apple, los nuevos AirPods 3. Aunque durante los últimos años han sido los más deseados para presumir, según los jóvenes entrevistados, ahora dan una imagen obsoleta, y la asocian a los "tech Bros" y una cultura que odian y de la que quieren huir.
Quién sabe, puede que si la cosa siga así Apple tenga que recuperar el jack de audio de 3,5 mm en el iPhone, de la misma manera que ha recuperado los puertos del nuevo MacBook Pro.