
La producción del nuevo Samsung Galaxy S21 FE podría ser retrasada, o incluso cancelada, si no se solucionan los problemas de suministro de chips que están asolando a la industria. Pero Samsung afirma que no hay cancelación, pero al mismo tiempo no confirma la existencia del nuevo modelo.
Si llega al mercado, el Galaxy S21 FE puede convertirse en uno de los modelos más deseados, a juzgar por el éxito de su predecesor, el Galaxy S20 FE. La idea de los FE (Fan Edition) es ofrecer móviles de gama puntera, pero a un precio mucho más asequible. El S20 FE sigue siendo considerado como una gran compra para obtener la calidad de los S20 pagando menos.
Sin embargo, el Galaxy S21 FE puede no tener la misma oportunidad para atraer a los consumidores, y todo por circunstancias externas. El pasado fin de semana el medio surcoreano ETNews publicó que Samsung estaría cerca de suspender la producción de este nuevo móvil, por falta de suministros.
No hay consenso entre los medios de qué partes concretas son las que están provocando problemas, y la razón de esta falta de piezas. ETNews publicó que problemas del procesador Snapdragon 888 tenían la culpa, y que el pasado 11 de junio Samsung avisó al resto de proveedores que parasen la producción de piezas. Sin embargo, desde entonces el medio ha borrado el artículo.
En cambio, Ice Universe, un famoso especialista en filtraciones, apunta a las baterías como el verdadero motivo de los retrasos. Por último,en Android Community creen que es una simple cuestión de prioridades para Samsung, que querría centrarse en sus futuros móviles plegables, el Galaxy Z Fold 3 y Galaxy Z Flip 3; recordemos que Samsung también está trabajando con Google en su primer plegable, el Pixel Fold.
El Galaxy S21 FE aún no ha sido anunciado oficialmente por Samsung, pero su existencia no es precisamente un secreto: ha sido filtrado en varias ocasiones y ya se conoce hasta su diseño. Basándonos en estas filtraciones, el S21 FE sería un móvil con pantalla de 6,4 pulgadas, AMOLED con 120 Hz, un Snapdragon 888 con 8 GB de memoria RAM, 256 GB de almacenamiento, batería de 4.5000 mAh con carga rápida de 25 W, y tres cámaras traseras: de 12 MP con OIS, de 12 MP ultrapanorámcia, y telefoto.
Por lo tanto, si finalmente no llega al mercado no sería "cancelado" técnicamente hablando. Por eso, para Samsung es una situación un poco extraña, y el comunicado oficial así lo refleja. La compañía afirma que no puede hablar de detalles de productos aún no lanzados, pero que "no se ha determinado nada sobre la supuesta suspensión de producción"; en ningún momento Samsung nombra el modelo, ni siquiera confirma que haya un nuevo móvil como tal.