El grupo español MásMóvil ha situado Portugal entre las prioridades estratégicas para el próximo año. Tras la compra de una participación minoritaria en Cabonitel -propietario del operador de móvil Nowo Communicationes y el cablero Onitelecom Infocomunicaçoes-(Oni)-, la compañía que lidera Meinrad Spenger prevé asegurar su presencia en el 5G del país vecino.
Por lo pronto, el grupo español prevé acudir a la subasta de frecuencias que acogerá el país vecino la próxima primavera. Lo hará de la mano de Gaea Inversión, sociedad de Inveready, también accionista de MásMóvil y VozTelecom. Precisamente, el impulso de estas actividades estarán dirigidas por Arturo Dopico, ex primer ejecutivo de R Galicia durante 18 años y, desde hace apenas un mes, nuevo consejero delegado de Nowo y Oni.
Consciente del potencial de crecimiento que ofrece Portugal -tanto en telefonía móvil como en fijo-, el grupo MásMóvil considera que ha llegado el momento de reforzar su incipiente expansión internacional y aprovechar la oportunidad del 5G. En el interés aumenta dado el planteamiento comercial de Oni, dirigido al mercado empresarial, compañía con soluciones de servicios en la nube, redes privadas, seguridad informática e Internet de las Cosas. Por su parte, Nowo ofrece servicios convergentes al cliente final, con ofertas de acceso a Internet (fijo y móvil) y televisión de pago. En esta ofensiva, el cuarto mayor operador español podría contar con el apoyo financiero de Digital Bridge, fondo que planea invertir alrededor de 500 millones de euros -a lo largo del primer trimestre de 2020- en el despliegue de una red de fibra óptica de alcance nacional en Portugal. Digital Bridge realizará la inyección económica en colaboración con Nowo, filial lusa del Grupo Más Móvil, según apuntan fuentes del sector.
El pasado otoño, la Autoridad Nacional de Comunicaciones (Anacom) de Portugal desveló el proyecto de subasta de frecuencias de 5G, que se realizará a lo largo del primer semestre de 2020, presumiblemente a partir del próximo abril, para así cumplir con los objetivos de la Unión Europea y de la Agenda Portugal Digital de comercialización del 5G a partir del 30 de junio.
En este caso, el regulador buscará el mejor postor para la práctica totalidad de las bandas de frecuencias disponibles: 700 MHz, 900 MHz, 1800 MHz, 2.1 GHz, 2.6 GHz y 3.6 GHz. Al contrario de lo que ha ocurrido en otros países europeos, que han preferido distribuir el espectro disponible en diversas procesos de subasta, Portugal ha decidido poner en valor todo tipo de bandas en una sola convocatoria: desde las más valiosas de 700 MHz y 900 MHz, hasta las que posiblemente generarán un menor impacto recaudatorio, las de 3,6 GHz.