Ratchet & Clank, con 27 millones de copias vendidas en todo el mundo y un millón solo en España, es una de las licencias tradicionalmente más populares en consolas PlayStation, se reinventa el próximo mes de abril apostando por llegar a públicos de todas las edades a través de dos vías: con un videojuego exclusivo para PS4 y con una película de animación. Ambos formatos abordan la misma historia de manera entrelazada e incluso complementaria, de tal forma que ninguno queda a la sombra del otro.
Esta particularidad se explica muy bien en palabras de sus creadores, que definen el proyecto como "un videojuego basado en una película basada en un videojuego". Y es que Ratchet & Clank no es otra cosa que una revisión del juego original lanzado para PlayStation 2 en el año 2002, con 14 años entre medias que parecen justificar el rescate de la historia del impulsivo mecánico Ratchet y su compañero robot, Clank. Tanto película como juego narran la historia de amistad entre los dos personajes y las aspiraciones de Ratchet de convertirse en un héroe para salir de su pequeño garaje de reparación de naves.
El proyecto ilusiona a sus creadores, Insomniac Games, encargados de volver a llevar a los personajes al videojuego, esta vez a PlayStation 4. Precisamente es la máquina de Sony la que comentan ha hecho posible poder estrechar las distancias entre lo que vemos en la película de animación y en el mundo virtual que podemos visitar en consola. A algo más de un mes de su lanzamiento, hemos podido probar el juego por primera vez, comprobando que las diferencias visuales entre los dos formatos son mínimas o casi inexistentes y que cada uno tiene personalidad propia.
Mientras la película está dirigida a un público principalmente infantil, apostando por la simpatía y el carisma de sus personajes y por una historia de aventuras, el videojuego profundiza más en el mismo arco argumental, dando cabida a contenido específicamente pensado para los jugadores. En resumen, dos formatos que parece no dependen el uno del otro para sostenerse por sí mismos, algo que no suele ser muy habitual con este tipo de licencias.
En este sentido estamos más habituados a lanzamientos de videojuegos sacando provecho de licencias jugosas primero expuestas en las salas de cine o a la inversa, lo que no siempre depara un buen resultado en términos de calidad. El ejemplo de Ratchet & Clank no es el único de producción paralela que hemos vivido en los últimos tiempos; sonado es el caso de Sonic Boom, la reinterpretación de la mascota de SEGA en forma de serie y videojuego, que no llegó a convencer a los jugadores.
PlayStation también se ha involucrado coproduciendo la película de Ratchet & Clank, y según nos han contado los responsables del juego, Insomniac Games, el proceso de trabajo con ambos formatos ha sido paralelo en todo momento para que cada paso en los departamentos creativos se diera en común. El resultado lo podremos ver el 20 de abril en PlayStation 4 y el 29 del mismo mes en las salas de cine.