Editorial
- 08/11/2013, 11:00
El consejero delegado de IAG, el holding que integra Iberia y British Airways, reorganizó ayer la cúpula de ambas aerolíneas y deja sólo con la labor de vicepresidente a su hombre de máxima confianza, Martin Broughton. Walsh simplifica las filiales al unificar en una sola persona al consejero delegado y al presidente de cada compañía. Antonio Vázquez deja la presidencia, que ejercerá desde enero Luis Gallego, un hombre del círculo de Walsh y actual consejero delegado. La procedencia de Gallego del low cost indica la estrategia que se va a seguir para recuperar la rentabilidad de Iberia, lo que supone un nuevo rumbo para remontar el vuelo. Un objetivo que no consiguió Vázquez y por eso Walsh le aparca en su presidencia no ejecutiva en IAG.